Enfermería, sentido de vocación y humanismo
21 de noviembre, Día de la Enfermera. Comenzó como una tarea de acompañamiento y consuelo a los enfermos. Pero desde mediados del siglo XIX se fue complejizando su labor. En la actualidad la Enfermería es una profesión cargada de historia, investigación científica y sentido práctico. Se remonta a la figura de Florence Nightingale, quien aplicó métodos estadísticos, de lavandería y comida hospitalaria, además de organizar a las enfermeras colectivamente para darles una formación sistemática, tanto teórica como práctica.
La importancia social de la Enfermería no se vislumbra hasta que no se vive de cerca un problema de salud. Ahí aparece con toda la fuerza esa figura que tiene el contacto directo y permanente con el enfermo.
Personalidad forjada, siempre con la presencia de coraje y con vocación para reconocer en el otro a un ser humano, estos testimonios de docentes y estudiantes de la carrera de Enfermería de la UNNOBA son un homenaje y una oportunidad para pensar en el rol social de estos profesionales.
Ser enfermera es lo que realmente quiero para el resto de mi vida. Siempre me gustó el cuidado de la salud y ayudar, son las razones por las cuales decidí estudiar esta maravillosa profesión. A medida que avanzo en mi carrera, me llena de alegría y satisfacción saber que puedo ayudar a personas y familias. Siento que crezco día a día como persona.
Natalia Belén Parente, estudiante, 20 años.
La Enfermería se basa en prestar atención a las personas que la requieren. Es reconfortante brindar cuidados de enfermería a las familias y la comunidad.
Pamela Ebelyn Quiroz Sánches, estudiante, 21 años
Muchas personas conocen la labor de la Enfermería cuando tienen a un ser querido enfermo. A mi tocó acompañar a una amiga en sus tratamientos hospitalarios y viví de cerca esta hermosa profesión. Ella siempre me hablaba de cómo su enfermero la acompañaba y así ayudaba a acortar los momentos de soledad. Creo que es una manera de hacer mucho por alguien.
Ana Claudia Luna, estudiante, 31 años.
Parte de mi infancia la pasé en el Hogar de Niños de Salto. A medida que pasó el tiempo, me convertí en cuidadora de los niños pequeños a quienes acompañaba al Hospital. La enfermedad y posterior muerte de mi padre durante mi adolescencia sensibilizó más mi vocación de servicio, por eso siento que elegí muy bien esta profesión.
Natalia Alejandra Pérez, estudiante, 25 años.
La Enfermería es una carrera muy gratificante que tiene muchas variantes de trabajo. Se puede desempeñar en diversos campos, desde lo asistencial hasta la investigación y la docencia. A su vez cada una de las áreas se subdivide de forma tal que en la actualidad existen enfermeras intensivistas, pediátricas, quirúrgicas, emergentólogas, neonatólogas, obstétricas, especializadas en Salud Pública, en Salud Mental, en Oncología, por ejemplo.
Además, la Enfermería no sólo es atender al enfermo sino que también abarca la prevención, el acompañamiento en la curación y la rehabilitación. Enfermería no es una profesión fácil, día a día se presentan momentos duros y tristes, pero a su vez tiene muchas satisfacciones reflejadas en la sonrisa agradecida de cada paciente, en el alivio de su dolor y en la llegada de una nueva vida.
Lic. Amelia Teresa Benítez, docente y jefa de Servicio Hospital San José de Pergamino.
Desde mi infancia siempre me conmovió el dolor y el sufrimiento del otro. Cuando alguien se lastimaba, allí estaba yo para limpiarle la herida. La vocación estaba, pero se fue desarrollando y acrecentando a medida que avancé en la carrera.
Aprendí que al ser enfermera tenía que escuchar y dar apoyo en determinadas circunstancias, así como también educar. A lo largo de esta profesión descubrí que amaba todo lo que encerraba. Se despertó en mí la pasión por la docencia y me encontré con la posibilidad de formar pares. Destaco que la Enfermería nos permite trabajar tanto en el área asistencial, como en la investigación, lo educativo y en la administración.
Lic. Cristina Alejandra Curia, docente de “Enfermería Infanto-Juvenil”
Varias veces, a lo largo de mi desempeño profesional, me he formulado la pregunta ¿por qué decidí estudiar enfermería? Provengo de una mamá enfermera que amaba su profesión. Yo quise imitarla.
Esta carrera genera sentimientos encontrados y ambivalentes. Me hacía la misma pregunta cuando estaba frente al dolor de cada individuo o frente a una pérdida irreparable. La respuesta era simple: porque estás preparada para esto, sabés hacerlo y es la esencia de la profesión.
Otro momento en que me hacía la pregunta era cuando pasaba las fiestas de fin de año trabajando con colegas y personas en situación de enfermedad. Ellos esperaban por vos y muchas veces éramos las enfermeras su única compañía en esos momentos. Esa respuesta era gratificante.
En la actualidad me dedico a la docencia y frente a la misma pregunta contesto: la Enfermería te fortalece como ser humano, ya que es una profesión que permite ser parte de la vida del otro, acompañarlo en momentos de enfermedad, rehabilitación, nacimiento y dolor.
Lic. Cristina Ardovini, docente de “Enfermería Comunitaria” y “Ética en la Enfermería”
Las enfermeras tenemos el privilegio de acompañar a los pacientes y sus familias en las distintas etapas de la vida, ya sea ante un nacimiento, una enfermedad o la muerte.
Lic. Cristina Silvia Baccaro, docente de Enfermería
Lised Pachón, estudiante colombiana
“Acá es muy buena la formación académica”
Helia Lised Pachón Rodríguez es una estudiante colombiana de Enfermería que se encuentra cursando un semestre en la UNNOBA gracias al Programa de Movilidad Académica Colombia-Argentina (MACA). Consultada por El Universitario, narró que su vocación se despertó después de sufrir una experiencia traumática que la obligó a recibir cuidados intensivos.
“Cuando era pequeña sufrí un accidente mientras visitaba el campo, a la edad de siete años. Me transportaba en la moto con mi padre y tuve una fractura abierta en el pie izquierdo. Estuve inmovilizada por dos meses. El pronóstico no era favorable, al parecer debían amputarme el pie por una infección. Necesité un cuidado personalizado y al ver esa dedicación de quien me cuidaba supe que iba a inclinarme por una carrera del área de la Salud”, recordó Lised.
La estudiante colombiana vinculó la profesión con la capacidad de hacer algo por los demás, valorando la propia vida y sus posibilidades: “La Enfermería es un don. Si uno tiene la capacidad de cuidarse a sí mismo, de sentirse bien, de hacer cosas por uno, entonces por qué no pensar en ayudar a otros. Además -agregó Lised- al estudiar Enfermería uno adquiere el conocimiento científico para prestar un servicio ético y humanizado”.
Helia Lised es estudiante de la Universidad de Ciencias Aplicadas y Ambientales de Colombia, su institución de origen. Al comparar ambos países la estudiante se sorprende de que en Argentina las personas no elijan tanto a la Enfermería como opción universitaria: “En el ámbito profesional observo que hay muchas carreras con demasiada gente. Me pregunto quién va a cuidar de esas personas cuando enfermen si no hay gente capacitada para ayudarlos. La enfermería es una base sólida para la sociedad”, opinó la estudiante.
La experiencia en el país le permitió observar diferencias y capitalizar aprendizajes. “Mientras que en Colombia se tiene mucha práctica clínica, acá es muy buena la formación académica. En la UNNOBA el grupo es muy pequeño y eso da la posibilidad de tener un trato personalizado”, comparó.