Edificar el futuro: la UNNOBA construye cimientos en la región
En el marco de una etapa de consolidación en la región, la UNNOBA apuesta a crecer en su infraestructura para dar un soporte físico a la expansión académica e institucional.
En el último tiempo se inauguraron nuevos espacios para la realización de diferentes actividades y, además, se suman numerosos proyectos de corto y mediano plazo, que van en la misma dirección.
La apertura de dos nuevos espacios en el predio del Edificio Presidente Raúl Alfonsín, en Sarmiento 1169 (el Auditorio bautizado Bicentenario de la Declaración de la Independencia y el Laboratorio de Ensayos de Materiales y Estructuras, LEMEJ) son ejemplos de esta decisión adoptada por las autoridades universitarias. A ello habrá que sumarle la próxima inauguración de un espacio en la ciudad de Rojas y los proyectos del Comedor Universitario y Salón de Usos Múltiples en Junín, el Laboratorio de la Escuela de Ciencias Agrarias, Naturales y Ambientales (ECANA), y el Museo de Ciencia y Tecnología, entre otros.
El rector de la UNNOBA, Guillermo Tamarit, señala que se trata de “dotar a la institución de una perspectiva de infraestructura”, para consolidar “un espacio donde la Universidad se desarrolle en el futuro”.
En el mes de julio se inauguró oficialmente el Auditorio Bicentenario. “Se trata de algo necesario para la sede Junín de la Universidad”, afirma el arquitecto Martín Chacón, director de Infraestructura de la Universidad. “La sede de Junín de la Universidad no tenía lo que conoce específicamente como un auditorio. Sí contaba con el Aula Magna en el Edificio Alicia Moreau de Justo y con el Salón de la Democracia Argentina, pero no con un lugar con las comodidades propias para su uso específico, como una actividad teatral, musical, una charla y demás”.
Ubicado en el Edificio Presidente Raúl R. Alfonsín, el Auditorio Bicentenario es un espacio de trescientos ochenta metros cuadrados con capacidad para 200 espectadores.
Chacón explica que, a diferencia de lo que suele suceder con otros auditorios, “aquí el escenario no está elevado, sino que las butacas están instaladas en gradas”. Esta decisión se tomó porque es una sala relativamente chica, y esta disposición “permite ver bien de todos lados y, a su vez, posibilita el acceso de personas con restricciones motrices al escenario”.
El responsable de Infraestructura de la UNNOBA destaca que la acústica del auditorio “es muy buena” gracias a los paneles que fueron instalados para que se absorba el eco. Para eso se recibió el asesoramiento de profesionales en la materia.
Además, el lugar tiene una iluminación general de la sala y una específica para el escenario, lo que permite ambientar la presentación que allí se haga.
Por otra parte, en el mismo mes se inauguró el LEMEJ, un laboratorio que también fue construido en el predio del Edificio Presidente Raúl R. Alfonsín. “El LEMEJ tiene un aula, una sala de trabajo para investigación de gabinete, cocina, baño, una sala de reuniones, una oficina privada, un espacio denominado ‘sala húmeda’ porque se hacen pruebas con un ambiente determinado, y un espacio más grande donde se trabaja específicamente con las maquinarias”, describe Chacón.
En este lugar se puede hacer control de calidad de los metales y aleaciones utilizados en las construcciones y productos industriales, así como ensayos destructivos y no destructivos. Asimismo, se pueden realizar tareas de inspección de obra y asesoramiento en recuperación, reparación o refuerzos en construcciones existentes.
Extensión a la región
Si bien cuenta con dos sedes, que son las de Pergamino y Junín, la UNNOBA trabaja en la apertura de espacios en otras localidades de la región para llevar a esas comunidades actividades universitarias, principalmente de Extensión.
En ese contexto se firmó, en 2015, un convenio con el municipio de Rojas y, producto de ese acuerdo, en el futuro inmediato la UNNOBA inaugurará su propio espacio en la ciudad. Se trata de un inmueble cedido a la Universidad, en donde funcionaba la antigua estación del ferrocarril.
“Es un edificio que tiene más de cien años”, aclara Chacón. Allí se debió hacer una reforma muy profunda. Es que, más allá de la antigüedad de la construcción, en un momento dejó de funcionar como estación y se instalaron allí oficinas municipales muy diversas, de áreas como Cultura, Previsión Social, Trabajo, Tránsito, “todo con divisiones de durlock, de madera y pisos cambiados”.
Chacón indica que cuando la UNNOBA tomó posesión del inmueble, se trabajó en muchos aspectos sobre esa edificación de unos 400 metros cuadrados cubiertos: “Se hicieron baños, se modificó la cocina, se habilitaron oficinas de la planta baja y la planta alta, hubo que hacer mucho trabajo de carpintería, se estableció un solo ingreso, y una vez que estaba todo prácticamente terminado, tuvimos problemas de humedad con las fuertes lluvias, por eso se postergó la inauguración: hubo que arreglar los techos y solucionar la humedad de las paredes”.
Con todo, se mantuvieron las características estructurales de la construcción, que corresponden al “típico estilo inglés de todas las estaciones ferroviarias de la región”.
Otra de las obras que está en marcha es la del Comedor Universitario en la sede Junín. En rigor, será un edificio de Usos Múltiples, donde también habrá espacios dedicados al fomento de la cultura y las oficinas del área de Bienestar Estudiantil y de la Federación Universitaria.
“El comedor será mucho más que un lugar para comer. El nombre no identifica acabadamente todo lo que sucederá aquí, que tiene que ver con la vida universitaria y convertirse en un lugar de encuentro para la comunidad”, manifestó el rector en el acto de inicio de las obras.
El proyecto tiene, entonces, tres instancias: el comedor, el Salón de Usos Múltiples y el área destinada a Bienestar Estudiantil. Actualmente se está haciendo la primera de ellas.
Chacón especifica que en el comedor hay un sector en planta baja con una cocina, fotocopiadora, baños y un espacio central para mesas, arriba hay otro anillo para más mesas, y también hay una explanada en el exterior. La capacidad puede llegar hasta 300 personas sólo en el interior del edificio, es decir, sin contar la explanada que podrá utilizarse de acuerdo a las condiciones climáticas.
Mientras se trabaja en esa construcción, ya se está avanzando en la licitación para la segunda y tercera etapas de la obra, que serán el SUM y las oficinas.
El primero de ellos será “un lugar enorme que va a dar posibilidades de armar dos o tres escenarios y hacer diferentes eventos, y también tendrá un espacio afuera, en la explanada, como el comedor, lo que permitirá hacer eventos de los más variados”, asevera Chacón, quien además remarca que “la idea es que sea todo un edificio y que esté todo vinculado”.
Afincado en la calle Jorge Newbery, entre Italia y Sarmiento, la construcción es un antiguo galpón del ferrocarril, que a partir de esta intervención pasará a formar parte del corredor cultural educativo que fue definido por la Universidad y la Municipalidad para esta zona de la ciudad.
De cara al futuro
Otro de los proyectos es el Auditorio de la Escuela de Ciencias Agrarias, Naturales y Ambientales (ECANA), en Pergamino, que tiene unos 280 metros cuadrados cubiertos, una capacidad de 200 personas, y un equipamiento “propio de un Aula Magna”, con sillas, iluminación general, tarimas, con equipo de sonido y para proyecciones. Su inauguración está prevista para este año.
Además, en el corto plazo comenzará la construcción de la primera etapa del Laboratorio de la ECANA. “Hoy la Escuela cuenta con un espacio que va a ser utilizado para extenderlo –comenta Chacón–. De los 150 metros que hay actualmente, pasará a tener unos 600”.
El titular del área de Infraestructura de la UNNOBA subraya que “un laboratorio es una construcción muy específica, en la que no hay nada librado al azar, porque tiene que ser absolutamente funcional”.
Mientras se llevan a cabo las obras descriptas anteriormente, se están desarrollando otros proyectos de manera paralela. Uno de ellos, el Museo de Ciencia y Tecnología es “un proyecto ambicioso que se llevará a cabo en el terreno que está detrás del predio Mr York”, describe Chacón.
Y hay más iniciativas planificadas, como la instalación de más aulas para la ECANA, la ampliación de la Escuela de Diseño, un SUM para Extensión en el Edificio Presidente Raúl R. Alfonsín, o la construcción del cuarto y quinto piso del Edificio Elvira Rawson de Dellepiane (ubicado en Newbery y Rivadavia).
Se trata, en definitiva, de una concepción de la educación superior con perspectiva de futuro, como indica Tamarit: “Nosotros todavía estamos en una etapa inicial, pero tenemos que pensar la Universidad para los próximos 50 o 100 años, y generar certezas respecto de qué tipo de actividades podemos desarrollar de aquí en adelante. Entonces yo creo que estos son mensajes del rumbo de la Universidad, que trascienden el aspecto de la infraestructura. Estas iniciativas señalan con toda claridad para dónde vamos”.