El trabajo infantil viola los derechos humanos

Por Paula Judurcha*

Profesora Adjunta del Área Derecho Social en la Cátedra de Derecho del Trabajo y la Seguridad Social de la carrera de Abogacía de la UNNOBA


Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT) el trabajo infantil es una violación de los derechos humanos fundamentales, habiéndose comprobado que entorpece el desarrollo de las niñeces y que, potencialmente les produce daños físicos y psicológicos para toda la vida.

Yukiko Arai, directora de OIT Argentina, manifestó que en el mundo hay más de 160 millones de niños, niñas y adolescentes (NNyA) entre 5 y 17 años, de los cuales 79 millones realizan trabajos peligrosos. Esa cifra podría aumentar en 8,9 millones para fines de 2022 como consecuencia de la crisis actual. En esa misma línea, en la Quinta Conferencia Mundial sobre la Erradicación del Trabajo Infantil celebrada este año en África se ha informado que las cifras están aumentando y la pandemia amenaza con revertir años de progreso.

En tanto, en nuestro país —según el mismo informe— 1 de cada 10 NNyA que viven en áreas urbanas realiza al menos una actividad productiva, cifra que se duplica en el sector rural. Esta situación se profundizó a causa de la pandemia ya que, a finales de 2021, entre adolescentes que realizaban alguna actividad laboral orientada al mercado, 7 de cada 10 habían comenzado a realizarla desde el inicio de la cuarentena, según un relevamiento de UNICEF.

Entonces, ¿cómo hablar de una “infancia universal” tal como lo pregona la Convención de los Derechos del Niño? O tal vez, ¿deberíamos de hablar de una “infancia sesgada”, teniendo en cuenta que no todos los niños ni niñas ven cubiertas sus necesidades básicas, respetados sus derechos a la educación, recreación, acceso a la salud y tantos otros reconocidos en normativa nacional e internacional?

No es lo mismo definir una niñez cuyo desarrollo lo es en la plantación de yerbales, en los tabacales, en las minas,  en la plantación de uvas, en las algodoneras, en la cosecha de nogales, cuidado de animales, en el servicio doméstico, en la vía pública, en la recuperación de materiales reciclables, en turismo sexual en la Triple Frontera, que una niñez desarrollada en una zona urbana con acceso y cobertura de necesidades básicas como salud, alimentación, vivienda y educación.

Es por ello que resulta interesante el vínculo que se puede entretejer entre el trabajo infantil y la definición de pobreza infantil que hacen Alberto Minujín y Enrique Delamónica en los siguientes términos:

La pobreza infantil abarca tres dominios interrelacionados: la privación, es decir la falta de condiciones y servicios materiales esenciales para el desarrollo; la exclusión, entendida como el resultado de procesos de desajuste, a través de los cuales la dignidad, la voz y los derechos de los niños son negados o sus existencias amenazadas, y la vulnerabilidad, que es definida como la ineficiencia de la sociedad de poder controlar amenazas existentes en sus entornos que atentan contra los niños.

Estas tres dimensiones generan el ingreso precoz de las infancias al mercado laboral.

Fuente: Un sueño para Misiones, suenoparamisiones.org

Estamos atravesando una situación social muy compleja en las que las niñeces ven afectadas, no solo su presente, sino su futuro. Una situación de crisis estructural que nos interpela y requiere de la adopción de políticas públicas profundas y urgentes, sin dudas, a partir del punto nodal de la educación. Pero, como dijimos al comienzo, esta es una crisis multidimensional y relacional de manera que se requiere de una integralidad desde las aristas de salud, la economía, la seguridad social, cuidados, el desempleo y la situación de trabajo precario de sus entornos y, todo ello, con perspectiva de género que permita asegurar la igualdad de oportunidades.

¿O simplemente será una utopía creer que el trabajo infantil se va a acabar y no seguirá siendo uno de los pilares necesarios para la rentabilidad y el sostenimiento del sistema?

*Paula Judurcha es magíster en Derecho del Trabajo.

Foto de portada: Lautaro Chiesa


Bibliografía

LLobet, V. (2015). Infancia y Desigualdades Sociales. Reseña de Unequal Childhoods. Class, Race, and Family Life. Revista Horizontes Sociológicos, 3, 141-145.

Minujin, A., Capuano, A., & Llobet, V. S. (2013). El desafío de la pobreza infantil: hacia una reconceptualización y medición multidimensional.