Inclusión con calidad
Por Guillermo R. Tamarit
Doctor en Derecho. Profesor de Derecho Público de la UNNOBA. Actual rector de la UNNOBA (electo para el período 2019-2023).
El pasado 14 de junio, en oportunidad del acto de la asunción del Rectorado de la Universidad Nacional del Noroeste de la Provincia de Buenos Aires para el período 2019-2023, planteamos nuestra perspectiva de la educación superior.
Justamente ese día se cumplían 33 años del fallecimiento de Jorge Luis Borges. Lo recordé a partir de una frase, que para los que estamos comprometidos con la tarea de la educación, resulta significativa e inspiradora: “Creo que uno solo puede enseñar el amor de algo. Yo he enseñado, no literatura inglesa, sino el amor a esa literatura. O mejor dicho, ya que la literatura es virtualmente infinita, el amor a ciertos libros, a ciertas páginas, quizás a ciertos versos. Es decir, lo que hace un profesor es buscar amigos para los estudiantes. El hecho de que sean contemporáneos, de que hayan muerto hace siglos, de que pertenezcan a tal o cual región, eso es lo de menos. Lo importante es revelar belleza y solo se puede revelar belleza que uno ha sentido”.
Esta visión sobre el acto de enseñar coincide, en cierto sentido, con la de aquellos reformistas de 1918, quienes señalaban el vínculo profundo que tenía lugar entre el profesor y el alumno, a partir de la búsqueda del conocimiento: “Si no existe una vinculación espiritual entre el que enseña y el que aprende, toda enseñanza es hostil y por consiguiente infecunda. Toda la educación es una larga obra de amor a los que aprenden”. Aquellos jóvenes, como Borges, consideraban “maestros” a “los verdaderos constructores de alma, los creadores de verdad, de belleza y de bien”.
Nuestra Universidad se inspira en estos valores, relacionados con la Reforma Universitaria de 1918. Además de esta perspectiva sobre la educación, los reformistas nos dejaron otros legados que hoy seguimos defendiendo: autonomía de las universidades, cogobierno universitario, universidad abierta y democrática con fuerte protagonismo de los estudiantes, extensión e investigación puestas al servicio de los intereses populares.
Más allá de estos valores centenarios, consideramos que una Universidad del siglo XXI, debe tener una visión global, y, al mismo tiempo, estar preocupada por su región. Esto no debe hacernos perder de vista, a su vez, que Latinoamérica sigue siendo nuestro espacio de pertenencia.
En el nuevo contexto global, debemos atender a nuevas problemáticas: la incertidumbre en los procesos políticos, económicos y sociales que impactan en los procesos de desigualdad social, la nueva configuración del mundo del trabajo, el impacto de la tecnología en la vida, las nuevas demandas en torno al género, entre otras.
Para todos los desafíos que tenemos por delante, confiamos en una forma de trabajo que privilegia la honestidad como una manera de afrontar la tarea cotidiana. Entendemos que ella es una de las principales herramientas con que cuenta la sociedad para su mejora. Al mismo tiempo, confiamos en el trabajo en equipo, como fórmula a partir de la cual realizamos nuestra mejor contribución a la educación superior y al esfuerzo continuado.
En el centro de nuestras preocupaciones se encuentra la cuestión social. Consideramos, como Domingo F. Sarmiento, que “todos los problemas son problemas de educación”. Por eso, como sociedad debemos redoblar esfuerzos para resolver las cuestiones más acuciantes de pobreza, falta de trabajo de calidad, y falta de competencias y habilidades de importantes sectores sociales, en especial de los jóvenes. El aporte de la UNNOBA en este sentido refiere a trabajar desde la oferta de grado académico en el fortalecimiento de las áreas de vacancia y las carreras prioritarias que están en línea con las políticas de desarrollo de la región.
En el plano del trabajo realizado, debemos remarcar el crecimiento que ha tenido la ciencia en la región, no solo por la cantidad de institutos y centros creados en el noroeste bonaerense a partir de la instalación de la UNNOBA, sino también por la cantidad de nuevos investigadores que están abocados específicamente a esa tarea dentro de la Universidad. Estos científicos de trayectoria son responsables de guiar a los becarios, quienes son graduados o alumnos de la Universidad que decidieron iniciar su carrera de investigación desde una perspectiva regional. Debemos enfatizar que esta política universitaria que propició la creación de institutos y actividades científicas se funda en la convicción de que la investigación debe ser la locomotora que guíe al resto de las actividades universitarias. Porque estamos persuadidos de que las universidades que no investigan no son verdaderas universidades.
Estamos orgullosos también de la amplia cobertura territorial que hemos logrado a través de la Extensión Universitaria. No solamente la Universidad ha llegado a una gran cantidad de localidades de la región, sino también a distintos grupos sociales y generacionales, desde niños en las programas de extensión y las “Casitas del Saber”, hasta adultos mayores con el PEPSAM.
Nuestro horizonte futuro apunta a seguir trabajando por la inclusión y la calidad. Inclusión a través del programa Nexos, para que cada vez mayor cantidad de jóvenes lleguen a la Universidad desde las actividades de articulación que realizamos con los colegios secundarios de la región. A su vez, nuestro Programa de Educación Digital nos permitirá llegar a los sectores más alejados de la región. En tanto, nuestro Instituto de Oficios se ocupará de mejorar las posibilidades de los trabajadores y desocupados.
En relación a la calidad, entendemos que ella se sustenta en evaluar cada una de nuestras actividades y plantearnos, en función de ello, procesos de mejoras. Por eso, tenemos previsto realizar una nueva evaluación integral de la institución, a la vez que desarrollaremos el Programa de Evaluación de Investigación. Estas acciones nos permitirán plantearnos políticas de mediano y largo plazo consistentes con las demandas de la región y el país.
Creemos que este es el camino para desarrollar “más y mejor universidad pública”.