Ciencia e innovación al servicio de la comunidad

Por Gricelda Incerti

En un mundo donde la calidad y la seguridad son primordiales, el Laboratorio de Ensayos de Materiales y Estructuras (LEMEJ) se erige como un pilar fundamental en la evaluación y mejora de los materiales y las construcciones. Creado por la UNNOBA en el año 2014, este laboratorio no solo se dedica a la investigación, capacitación y asesoramiento, sino que también ofrece servicios a terceros de alta calidad. Su misión es clara: asegurar que todo lo que se libere al uso público cumpla con los más altos estándares de seguridad y rendimiento, garantizando así un futuro más sólido y duradero para  infraestructuras y productos industriales.

El legado del ingeniero Luis Lima como impulsor del LEMEJ es un  reflejo de su visión transformadora sobre la educación superior.  El exrector organizador de la UNNOBA y exdirector científico de este laboratorio destacó la importancia de que las universidades respondan de manera proactiva a las necesidades del entorno, adaptándose y desarrollando soluciones efectivas. Su labor como motor del laboratorio mostró la firme convicción que tenía respecto de la necesidad de integrar la teoría con la práctica, fomentando una colaboración dinámica entre la academia y la industria para enfrentar los desafíos contemporáneos.

Armado de dispositivo para ensayo de flexión. Evaluación de comportamiento de distintos materiales. Foto: Lautaro Chiesa.

A diez años de su creación, el LEMEJ brinda más de 90 servicios a terceros de la comunidad y se afianza en 33 localidades del noroeste bonaerense. Este espacio científico hace honor a los ejes de sus inicios, siendo un centro de investigación y transferencia, ofreciendo soluciones a las demandas de la comunidad, enfocándose en asesoramiento, capacitación y prestación de servicios en materiales, estructuras, construcciones y productos industriales

Su objetivo es garantizar la seguridad, conforme a la normativa vigente, así como mejorar la calidad, durabilidad y prestaciones de los productos. Además, el laboratorio realiza actividades de investigación para generar conocimiento científico y promover la transferencia tecnológica. Desde el año 2019 es uno de los centros asociados a la Comisión de Investigaciones Científicas de la Provincia de Buenos Aires (CIC). “Utilizando diferentes estrategias, algunas más acertadas que otras, equivocándonos y aprendiendo, el LEMEJ ha logrado impactar en diferentes localidades de la región noroeste de la provincia de Buenos Aires, a través de servicios a terceros”, afirma la ingeniera María José Castillo, directora ejecutiva del LEMEJ.

El equipo del LEMEJ en 2018. De izquierda a derecha,: Alejandro Mateos, Renzo Meloni, Ana Clara Cobas, María José Castillo, Luis Lima, Miguel Tortoriello y Lautaro Zorilla. En el centro de la foto se encuentra Lima, (fallecido el 28/07/2023), quien fue el creador del LEMEJ y hoy es fuente de inspiración para todos sus integrantes.

Castillo menciona distintos hitos y logros del LEMEJ, a lo largo de sus diez años de existencia: la incorporación de becarios doctorales; la participación en redes internacionales como la RILEM (Unión Internacional de Laboratorios y Expertos en Materiales, Sistemas y Estructuras de Construcción), con sede en Francia,  y la FIB (Federación Internacional del hormigón), con sede en Suiza; la certificación de la norma ISO 14001 (estándar internacional que ayuda a las empresas a gestionar su impacto en el medioambiente) desde el año 2023; la aprobación del FIN SET 2015 ( Fondo Tecnológico Argentino), lo que le permitió obtener un importante financiamiento a partir de lo cual adquirió 21 equipos, entre ellos una máquina universal de ensayos de 60 toneladas, única con esa capacidad en la región; el edificio propio inaugurado en agosto de 2016 en la localidad de Junín y su obra de ampliación en 2024; y, finalmente, el otorgamiento de la patente en 2024 a partir del desarrollo de un nuevo material para la construcción, resultado de un proyecto de investigación.

María José Castillo, directora Ejecutiva del LEMEJ. Foto: Lautaro Chiesa

—¿Cómo ha impactado el LEMEJ en la comunidad educativa y en la región a lo largo de su existencia?

—El impacto ha sido sumamente positivo, a partir de la inserción como laboratorio de control de materiales, el conocimiento generado y la capacidad de respuesta que ha desarrollado para atender las demandas del medio. Por esto, se visualiza un incremento en el control y, por consiguiente, en la calidad de muchos materiales. En particular, se ha observado un incremento significativo en la calidad del hormigón utilizado en la región, ya que existe la posibilidad de que todas las partes interesadas (hormigoneras, usuarios, contratistas) puedan ensayar el producto. Por otro lado, participa de diversos proyectos de extensión universitaria, lo que permite llegar a instituciones educativas de nivel medio, como la EEST N°1 de Junín a partir de la ejecución de actividades de colaboración.

—¿Cuáles han sido los mayores desafíos que ha enfrentado el laboratorio y cómo se han superado?

—Un enorme desafío que se le ha planteado al LEMEJ es la flexibilidad a la hora de dar respuesta a las necesidades del medio. Es común escuchar decir que los tiempos de la industria no son los tiempos de la universidad, desde este lugar ha sido necesario establecer una metodología de trabajo para la prestación de servicios que permita responder en tiempos acordes a la industria, pero consistentes y ajustados a la dinámica de la universidad. Para ello, fue necesario constituir criterios de funcionamiento, identificar "cuellos de botella-2 y establecer prioridades.

—En un mundo en constante cambio, ¿cómo han evolucionado para adaptarse a nuevas realidades educativas?

—Situar distintas cátedras en las propias instalaciones del LEMEJ ha generado clases sumamente dinámicas. En general, cada clase consta de una parte teórica, desarrollada en el aula, y otra parte práctica, en la sala de ensayos. Esto favorece la participación activa de los estudiantes, acorta la distancia entre teoría y práctica, y afianza el conocimiento generado. Por otro lado, se ha desarrollado un sistema propio de pasantías para estudiantes avanzados de las carreras de ingeniería. Esto constituye una propuesta formativa complementaria a la curricular para todos aquellos estudiantes que quieran "aprender haciendo". La articulación entre la investigación, la prestación de servicios y las actividades de extensión, permiten al cuerpo docente del laboratorio incorporar, año tras año, nuevos contenidos que se ajusten a los requerimientos del medio socioproductivo.

—¿Qué importancia tienen las colaboraciones con otras instituciones en el desarrollo del LEMEJ?

—Al principio, la interacción con otras instituciones locales, nacionales e internacionales fue fundamental para mejorar las actividades y la capacidad del laboratorio, a través del intercambio de conocimientos y colaboraciones en el uso de equipamiento e infraestructura. Con el tiempo, al contar con capacidad operativa propia, estas colaboraciones permitieron ampliar la oferta tecnológica del laboratorio. En algunos casos, la caracterización de materiales requiere evaluar varias propiedades, lo cual se realiza en su totalidad en el laboratorio o, cuando no es posible, se recurre a instituciones externas asociadas. Esta cooperación fomenta una sinergia que va más allá de la prestación de servicios, promoviendo investigaciones conjuntas, capacitaciones, pruebas interlaboratorios, coorganización de eventos científicos y estancias de investigación para la formación técnica del personal.

—¿Cuál es su visión para el LEMEJ en los próximos diez años?

—Uno de los aspectos a tener en cuenta es la necesidad de diversificar los servicios. Si bien contamos con una oferta tecnológica de más de 90 servicios, hoy la demanda se enfoca principalmente en el control del hormigón. Por ello, nuestro desafío es profundizar las acciones de difusión de las actividades del laboratorio para que diferentes sectores de la industria, que sabemos que tienen demandas inherentes a las prestaciones del laboratorio, lleguen, y podamos dar respuesta. Otra cuestión a atender y fortalecer son las competencias técnico-científicas de los docentes investigadores del LEMEJ. Por un lado, es necesario avanzar en la formación continua de los integrantes, tomando cursos de perfeccionamiento, capacitaciones en técnicas específicas, formación en posgrado. Y, por otro, es necesario incrementar el capital humano abocado a las actividades científico-tecnológicas del Laboratorio, a través de la realización de maestrías y doctorados.

Diseño: Laura Caturla

El legado de Luis Lima: diez años de innovación y formación

“El LEMEJ fue creado oficialmente en 2014, pero la idea surgió en 2012, impulsada por el ingeniero Luis Lima, quien soñó con un laboratorio capaz de responder a las demandas de la comunidad, más allá de ofrecer servicios y capacitaciones. Su visión fue certera desde el principio y, aunque hoy no lo tengamos físicamente con nosotros, su legado permanece en el laboratorio", afirma Miguel Tortoriello, subdirector del LEMEJ, quien en cada palabra destaca al exrector de la UNNOBA como alma mater del laboratorio.

Para Tortoriello, la vinculación del laboratorio con las cátedras es fundamental en la formación académica: “A diez años, es imprescindible resaltar la estrecha vinculación del LEMEJ con las cátedras de ingeniería, especialmente en las áreas de materiales y estructuras. El laboratorio no solo realiza investigaciones y ensayos, sino que también se integra en la formación académica de los estudiantes. Es crucial que asignaturas como 'Tecnología de Materiales 1 y 2', y 'Unión de Materiales por Soldadura' se dicten en el propio laboratorio, permitiendo a los estudiantes experimentar de manera práctica lo aprendido en clase”.

Miguel Tortoriello, subdirector del LEMEJ.

El recuerdo de Lima vuelve una y otra vez en la charla. Para el subdirector del LEMEJ, el ingeniero fallecido fue "más que un colega": fue un mentor y una inspiración. “Aunque Luis Lima ya no esté, su influencia sigue viva en cada rincón del LEMEJ. Su visión, esfuerzo y dedicación fueron la piedra angular sobre la que se construyó este laboratorio. Desde sus primeros pasos, Luis no solo imaginó el LEMEJ como un espacio físico, sino como un motor de cambio y crecimiento para la comunidad, de investigación y educación en ingeniería. Aunque han pasado los años, su legado permanece palpable en la manera en que operamos día a día, en el espíritu de colaboración que caracteriza al laboratorio y en la calidad del trabajo que realizamos. Cada proyecto, cada investigación, cada clase que se dicta en este espacio lleva su huella”, sostiene emocionado.

Además de rector organizador de la UNNOBA, presidente de la UNLP y decano de la Facultad de Ingeniería (UNLP), Lima fue miembro de la Academia Nacional de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, de la Academia de Ingeniería de la provincia de Buenos Aires y presidente de la Asociación Argentina del Hormigón Estructural.

Un material único e innovador para la construcción

Alejandro Mateos es secretario del LEMEJ y uno de los inventores de las placas de poliestireno expandido de ultra alta densidad, logro por el que la UNNOBA obtuvo una patente.  "En 2020 —cuenta Mateos— comenzamos un proyecto de investigación, aprobado por la Secretaría de Investigación, Desarrollo y Transferencia de la UNNOBA, enfocado en el desarrollo de placas de poliestireno expandido de alta densidad, pensadas para su uso en la construcción, específicamente para cerramientos no portantes. El objetivo era evaluar su desempeño a través de ensayos similares a los utilizados para las placas de yeso, un material ampliamente usado en la construcción tradicional. La ejecución del proyecto no estuvo exenta de desafíos, sobre todo debido a las restricciones y dificultades logísticas impuestas por la pandemia del COVID-19. A pesar de las complicaciones, el trabajo en equipo, que involucró a docentes, graduados y estudiantes de la UNNOBA, fue fundamental para superar esos obstáculos."

Alejandro Mateos, secretario del LEMEJ. Foto: Lautaro Chiesa

A medida que avanzaban en la investigación, el equipo observó que el material tenía un gran potencial. Los resultados de los ensayos eran altamente satisfactorios, y los llevo a considerar registrar el desarrollo como una patente. Realizamos una búsqueda exhaustiva de patentes similares y no encontramos productos que pudieran competir con nuestras placas, lo que nos dio la certeza de que el proyecto tenía la suficiente altura inventiva", afirma Mateos.

El 20 de agosto de 2024, dos días antes de que el LEMEJ cumpliera diez años de vida, se recibió la confirmación de que la patente había sido otorgada por el Instituto Nacional de Propiedad Industrial (INPI), con la UNNOBA como titular y el equipo de investigadores, como autores.

¿Qué ventajas tienen estas placas, comparadas con las tradicionales? El secretario del LEMEJ afirma que tienen un enorme potencial para la industria de la construcción: “Comparadas con las tradicionales placas de yeso, las nuestras ofrecen varias ventajas, como un menor peso, una reducción significativa en la absorción de agua y una resistencia uniforme en todas las direcciones. Estos atributos las convierten en una solución más eficiente frente a los problemas que presentan los materiales convencionales." Si querés saber más sobre esta investigación, leé aquí.

El nuevo material desarrollado por el Laboratorio de Ensayos de Materiales y Estructuras se origina en el poliestireno expandido, también conocido como “telgopor”. Las ventajas frente a las placas de yeso son: mayor resistencia, bajo peso y menor absorción de humedad.

Arbolado urbano y medioambiente

La ingeniera Forestal, Dra. Ana Clara Cobas, es miembro del LEMEJ. Como docente e investigadora en el CITNOBA, lidera una de las líneas de investigación del LEMEJ enfocada en los bosques urbanos. Esta investigación analiza cómo el entorno urbano y las intervenciones humanas afectan el crecimiento de los árboles en las ciudades y su capacidad para ofrecer servicios ecosistémicos. El objetivo es mejorar su manejo y gestión para mitigar los efectos del cambio climático. Su rol no se limita a lo científico, sino que se complementa con la vinculación con los municipios de la región, brindando asesoramiento sobre arbolado urbano y líneas de extensión que tienen un alto impacto en las ciudades del noroeste bonaerense.

“En extensión, hace bastante que venimos trabajando con la temática de arbolado urbano y la importancia que tiene. Hemos trabajado en forestaciones de escuelas rurales, realizamos charlas en sociedades de fomento. También sobre papel artesanal y su manera de reciclarlo. Estamos asesorando a varios municipios sobre la planificación de su arbolado. Buscamos llegar a toda nuestra comunidad sosteniendo la idea fundamental de la perfecta convivencia que debe haber entre el medioambiente y los humanos”; afirma la investigadora.

Dra. Ana Clara Cobas. Foto: Lautaro Chiesa.

El trabajo de Cobas  busca sensibilizar a la comunidad sobre la importancia del arbolado urbano, promoviendo su gestión adecuada para mejorar la calidad de vida y mitigar los efectos del cambio climático. A través de su vínculo con los municipios, impulsa acciones concretas para fortalecer la sostenibilidad de las ciudades en la región.

Investigación sobre Soldadura de Aceros AHSS: Innovación y Seguridad en la Ingeniería

Uno de los proyectos de investigación más relevantes que el LEMEJ tiene en desarrollo está relacionado con la "soldabilidad de aceros avanzados de alta resistencia (AHSS)", especialmente, para productos industriales. El proyecto tiene dos líneas de trabajo: una relacionada con el desarrollo de aceros para mallas electrosoldadas en estructuras de hormigón, y otra, con la implementación de un proceso de soldadura en fase sólida para unir chapas de aceros AHSS.

El objetivo es estudiar el comportamiento de uniones soldadas en barras y chapas de estos aceros avanzados, evaluando su comportamiento químico, metalúrgico y mecánico. Dado el avance en el desarrollo de aceros de alta resistencia y los nuevos procesos de soldadura, se busca mejorar la calidad de las soldaduras y aumentar la seguridad de las estructuras mediante uniones más confiables. Además, parte del equipo colabora con otras universidades nacionales e instituciones públicas y privadas para fortalecer esta línea de investigación.

La articulación entre ciencia, formación y compromiso social

Cuando  le preguntamos sobre los inicios del LEMEJ, María José Castillo recuerda el momento en que el ingeniero Luis Lima les propuso un desafío. “Hace más de 10 años, Lima nos convocó con una idea superadora en aquel momento: crear un laboratorio que se convirtiera en un centro de referencia para la región noroeste de la provincia de Buenos Aires, especialmente en lo que respecta a materiales y estructuras. Con esa consigna, comenzamos a planificar la puesta en marcha del LEMEJ y nos embarcamos en esta aventura juntos.”

Una década después, el laboratorio se ha afianzado: " Hoy podemos decir con orgullo que el LEMEJ ha establecido su propio sistema de gestión de proyectos y un registro de servicios a terceros. Esto nos ha permitido generar indicadores, tomar decisiones informadas y proyectar acciones para el futuro. En estos 10 años hemos realizado más de 4800 determinaciones, atendido a más de 100 clientes y trabajado en 25 proyectos de investigación y extensión, algunos financiados externamente, otros internamente y también autofinanciados”, enumera Castillo.

A pesar de los logros cuantitativos, lo que realmente resalta es el impacto cualitativo del trabajo realizado; “La relevancia del LEMEJ no solo se visualiza en la cantidad de proyectos o informes técnicos, sino en su capacidad para articular actividad académica, investigación y vinculación con el medio socioproductivo. Esta retroalimentación constante entre estos tres espacios ha sido clave para el éxito del laboratorio. Los conocimientos generados no solo se traducen en servicios, sino que también alimentan los contenidos curriculares, mientras que las demandas de la región se convierten en proyectos de investigación y extensión”, afirma con entusiasmo.

Sin embargo, a pesar de estos logros, la directora del LEMEJ señala que aún queda mucho por hacer. “¿Eso significa que ya hemos alcanzado todos nuestros objetivos? Como diría Luis: 'De ninguna manera; por supuesto que no'. Queda mucho por recorrer, mucho por mejorar. Es esa búsqueda constante de mejora la que nos mantiene motivados para seguir trabajando".


El "dengue" del maíz

Por Gricelda Incerti

Los productores de maíz de nuestro país enfrentan un nuevo y peligroso adversario que ha ocasionado pérdidas millonarias: un insecto diminuto de solo 4 milímetros de longitud que aprovechó el cambio climático para proliferar y poner en riesgo las cosechas futuras. Les presentamos a la chicharrita.

Dalbulus maidis es el nombre científico de este insecto vector que transmite tres patógenos la bacteria Spiroplasma Kunkelii, el fitoplasma Maize Bushy Stunt y el virus del rayado fino del maíz, ocasionando en su conjunto una enfermedad que se denomina corn stunt o achaparramiento.

Tanto el insecto como la enfermedad se dan el sur de Estados Unidos hasta Argentina,  siendo favorecidos por el cambio climático.

Lo cierto es que este diminuto enemigo ha aumentado su población exponencialmente, causando estragos en las cosechas.  Las chicharritas son, en rigor, vectores de enfermedades que debilitan las plantas y reducen drásticamente la productividad de los cultivos: la plaga que acechó al maíz en la campaña 23/24 se "comió" más de US$ 2.000 millones de exportaciones, llegando a diezmar los lotes de las principales zonas productoras.

Dra. Inés Catalano. Directora Centro de Bioinvestigaciones de la UNNOBA. Foto: Nicolás Requena. CEDI

En el Centro de Bioinvestigaciones (CeBio) de la UNNOBA, la doctora Inés Catalano dirige el proyecto (financiado por PIC-SIB-UNNOBA) en el marco del cual se estudian dos especies de “chicharritas”: Delphacodes kuscheli, vector del agente que causa el “Mal de Río Cuarto”, y Dalbulus maidis, que causa el achaparramiento del maíz. “Podríamos decir que las chicharritas se alimentan de la sangre de la planta, vendría a ser el dengue del maíz”, compara la investigadora y directora del CeBio.

Este insecto, es un hemíptero, es decir, una especie con un aparato bucal adaptado para llegar a las tejidos conductores del maíz, el cual es su hospedante casi exclusivo. Es, además,  monófago, o sea que se alimenta casi exclusivamente de esta gramínea. Al hacerlo, puede transmitir enfermedades, la más frecuente es la causada por la bacteria Spiroplasma kunkelii.

Spiroplasma kunkelli. Representa el principal patógeno del achaparramiento del maíz.

El proceso ocurre así: cuando la chicharrita se alimenta, inyecta saliva y succiona savia. Si se alimenta de una planta enferma, llevará consigo al patógeno y, la próxima vez que ingiera, podrá enfermar nuevas plantas. Es un proceso similar a cómo el mosquito Aedes Aegypti transmite enfermedades.

"Achaparramiento" es el nombre vulgar con que se conoce a la enfermedad. Las especificaciones  del término las da Catalano: “El achaparramiento es el síntoma más drástico, el más fuerte. Es un acortamiento de los entrenudos de la planta de maíz y, entonces, el resultado es una planta petisa. Una vez que el insecto picó y contagió a la planta, la bacteria se aloja en el floema (tejido vivo de las plantas que transporta nutrientes),  que sería como nuestro sistema circulatorio. Por el floema va toda la comida, y todos los solutos para que el maíz pueda crecer".

En definitiva, a la planta no le llega su alimento: "La bacteria se aloja y obstruye el floema. Entonces, no le llegan esas reservas de alimento en el momento en el que maíz está en estadio reproductivo, que es cuando debe llenar el grano. Lo que tenemos, de esta manera, son maíces con menos producción. Abrimos las espigas y están vacías o mal granadas”.

Bajo la mira del vector

Si nos centramos en la chicharrita, se la reconoce por su tamaño muy pequeño, alcanzando no más que 3 a 4 mm de largo. El ejemplar adulto es color crema translúcido, con dos puntos más oscuros sobre la cabeza y con las alas más largas que el abdomen.

Un dato no menor es que la hembra puede colocar hasta 600 huevos, presentando por lo menos siete generaciones desde septiembre a mayo y sobreviviendo en el invierno en gramíneas, para luego colonizar el maíz siguiente. Las ninfas nacen libres del patógeno y, al igual que el adulto, lo adquieren al alimentarse de plantas enfermas. El adulto sobrevive, en promedio, 45 días, aunque los invernantes pueden llegar a sobrevivir hasta 90-120 días.

En la campaña 21/22  la plaga y la enfermedad se concentraron, principalmente, en el norte argentino. En la presente campaña hubo precipitaciones dispares en todo el país, lo que ocasionó siembras escalonadas, que proporcionaron alimento constantemente a la chicharrita y favorecieron su reproducción e incremento poblacional.

Carolina Sgarbi, profesora de Zoología Agrícola de la carrera de Ingeniería Agronómica de la UNNOBA

La ingeniera Agrónoma Carolina Sgarbi (profesora  de Zoología Agrícola de la carrera de Ingeniería Agronómica de la UNNOBA)  detalló cómo se dio el avance hacia la zona núcleo: “Este insecto está presente en nuestro país desde la década del 90, aproximadamente, siendo endémico del norte de Argentina. En los últimos años, las condiciones ambientales y agronómicas en nuestra región favorecieron el aumento de su presencia. Las condiciones ambientales que favorecen su desarrollo son altas temperaturas y bajas precipitaciones. En nuestra región, los inviernos han sido más benignos en los últimos años, permitiendo que una población remanente de chicharrita sobreviva y reactive su actividad en primavera. Agronómicamente, la ampliación de la 'ventana' de siembra del maíz ha hecho que el hospedante esté presente durante más meses, favoreciendo el aumento de las poblaciones”.

“Mientras haya cultivo de maíz, la chicharrita estará presente”, asegura Sgarbi y añade:  “La amplia época de siembra favorece el aumento de sus poblaciones debido a su alto potencial biótico, alta capacidad reproductiva y su movilidad. Donde se den las condiciones ambientales y agronómicas predisponentes, la chicharrita aumentará su población e invadirá nuevas áreas”.

Control de la plaga y desafíos actuales

En este contexto, desde el Laboratorio de Insectos de Interés Agrícola, ubicado en el seno del CeBio, buscan modos de controlar enfermedades del maíz a través de la genética. Los investigadores y técnicos están rodeados de estos milimétricos insectos y plantas de maíz, realizando en estos momentos el diseño de nuevos mecanismos de control de la transmisión de estas enfermedades que sean ecológicamente sustentables. En este aspecto se combinan las capacidades de biólogos, genetistas, ingenieros agrónomos y fitopatólogos. “Nuestro grupo de trabajo viene haciendo estos estudios a partir de un transcriptoma (genoma expresado) de Dalbulus, desde hace varios años. En verdad, tenemos un transcriptoma de cada estadio del ciclo de vida del insecto. Estos transcriptomas tienen la ventaja de ser una especie de 'fotografía' del genoma expresado en un momento específico. De esta manera, nuestra aproximación al problema que nos planteamos es mucho más práctica”, explica Catalano.

De acuerdo a la investigadora,  controlar esta plaga "resulta complicado", debido a la capacidad de los insectos para producir una gran cantidad de huevos y porque los insecticidas convencionales "no son totalmente eficientes". Ella y su equipo están investigando medidas de control, incluyendo insecticidas basados en ARN interferente, similar a lo utilizado en algunas vacunas de COVID-19. “Queremos 'silenciar' genes específicos del insecto, como aquellos involucrados en la oviposición, para impedir la puesta de huevos. Aunque esta técnica funciona en laboratorio, aún es un desafío aplicarla a campo" , especifica la investigadora.

Dalbulus maidis o chicharrita, cada vez más popular en el cultivo de maíz. Foto: CeBio.

La problemática de esta plaga a dado lugar a diferentes investigaciones desarrolladas a partir de tesis de grado, maestría y doctorado. Entre ellas, la de Victorio Palacio, en la Maestría de Bioinformática de la UNNOBA, y la tesis doctoral (en proceso de redacción) de Lucía Dalaisón, en la que se estudiaron los genes relacionados con la fecundidad de D. maidis. Este trabajo logró un avance sustantivo en el campo de conocimiento, ya que se logró silenciar los genes a través de alimentación

Gracias al transcriptoma ensamblado y anotado hace ocho años, se generó una base sólida para la inferencia génica de la especie que permitió realizar publicaciones en revistas de alto impacto, avanzar en varias tesis. En estos días ya estamos viendo resultados que pueden ser aplicados para dar respuesta al sistema productivo nacional”, afirma Catalano.

Catalano mencionó también un proyecto de mejoramiento genético en colaboración con el Centro Internacional en Maíz y Trigo, en México, utilizando más de doscientas especies de maíz para identificar líneas resistentes a la enfermedad o al Dalbulus. Este proyecto está enmarcado en el Doctorado de Mejoramiento Genético de la UNNOBA y llevado a cabo por la licenciada en Genética Noelia Beltrame.

 

Laboratorio de Insectos de Interés Agrícola, ubicado en el seno del Centro de BioInvestigaciones. Investigadores y técnicos rodeados de Dalbulus maidis y diferentes especies de maíz. Foto: Nicolás Requena. CEDI

Estrategias actuales de manejo

Actualmente se está debatiendo si sembrar o no maíz en la campaña 2024/25. Tanto los productores como las agencias relacionadas, tienen dudas sobre esta cuestión. Aún con el conocimiento existente sobre la biología y ecología del vector, las inquietudes no se despejan. Por el momento, lo que sí se sabe certeramente es que se pueden adoptar buenas prácticas de manejo.

En este sentido, la ingeniera Carolina Sgarbi es contundente: “Hay varias recomendaciones importantes, por ejemplo, controlar la densidad poblacional del insecto vector. Esto se puede realizar de varias formas. Entre ellas, es fundamental evitar realizar 'maíz sobre maíz' en el mismo ciclo de cultivo y eliminar plantas voluntarias. Vigilando maíces guachos (plantas que nacen a partir de granos perdidos en la cosecha) durante 90 días antes de la siembra se evita la fuente de inóculo de la enfermedad y que los adultos invernantes dejen descendencia. De esta manera se minimiza la sobrevivencia del vector”.

Sgarbi también hace hincapié en realizar siembras tempranas para escapar de la presencia de elevadas densidades de la chicharrita cuando la planta de maíz es más susceptible. Además, es crucial atender la rotación de cultivos, ya que la chicharrita es monófaga y, como depende de una sola especie, esto facilitaría cortar su ciclo. 

Otra de las medidas que se están evaluando es trabajar en el desarrollo de híbridos adaptados con tolerancia o resistencia al patógeno del achaparramiento del maíz.

Diseño: Laura Caturla


Inteligencia para el corazón

Por Gricelda Incerti

La mano izquierda de Anna Bertha Ludwig inició la radiología médica y las técnicas de diagnóstico por imagen, que tanto han contribuido al avance de la medicina. En noviembre de 1895, su esposo Wilhelm Conrad Röntgen, descubrió los Rayos X.  Mientras estudiaba el poder de penetración de los rayos catódicos, Röntgen observó que una placa de cartón cubierta de cristales de platino-cianuro de bario emitía una fluorescencia, que desaparecía al desconectar de la corriente.  Vio que al sostener un aro de plomo podía ver los huesos de la mano de su esposa. Röntgen decidió imprimir esta imagen de los huesos en una placa fotográfica y así fue como nació la primera radiografía.

Anna puso su mano izquierda para que se hiciera aquella radiografía en la que se ven algunos metacarpianos y huesos de los dedos de la mano, incluyendo un anillo.

La primera radiografía de la historia: la mano de Anna Bertha Ludwig.

La rica historia de las imágenes médicas creció y lo seguirá haciendo a medida que maximiza su eficacia gracias a aliados clave como la inteligencia artificial (IA), realidad aumentada, visualización 3D y la medicina nuclear. Tras pasar de lo analógico a lo digital hace más de 20 años, la radiología y el diagnóstico por imágenes ha evolucionado y ocupado un rol esencial en la medicina.

En el año 2019, en la UNNOBA se formó un grupo de trabajo interdisciplinario para llevar a cabo un proyecto piloto con el objetivo de automatizar el análisis de imágenes de resonancia magnética del corazón, extrayendo rápidamente (y sin participación humana) mediciones de algunos parámetros que los cardiólogos usan para sacar conclusiones e informar los estudios.

Desde el punto de vista informático, este equipo está conformado por investigadores del Instituto de Investigación y Transferencia en Tecnología (ITT) de la UNNOBA: la licenciada Sandra Serafino, y el ingeniero Lucas Benjamín Cicerchia, quienes trabajan junto a alumnos avanzados de las carreras de Ingeniería en Informática y Licenciatura en Sistemas; y, desde la medicina, por el cardiólogo Federico Cintora.

 

De izquierda a derecha: Facundo Argento, Lucas Benjamín Cicerchia, Federico Cintora y Sandra Serafino. Grupo de trabajo interdisciplinario que lleva a cabo el proyecto para automatizar el análisis de imágenes de resonancia magnética del corazón.

La UNNOBA se encuentra trabajando en proyectos de IA y análisis de imágenes en otras disciplinas desde hace años, ¿pero qué fue lo que llevó a utilizar en cardiología este algoritmo, y por qué?

Serafino evoca la génesis del proyecto: “Desde el Instituto (de Investigación y Transferencia en Tecnología), siempre estamos buscando problemas reales para plantear soluciones desde lo tecnológico. Esto ayuda a mejorar nuestros desarrollos y nuestras investigaciones, así como a acortar la brecha entre los problemas de la sociedad y los posibles aportes de la universidad.  Ante la inquietud y la demanda por parte del doctor Cintora, en 2019, y teniendo en cuenta que trabajamos con imágenes, no dudamos en llevar adelante el proyecto”.

Cintora, cardiólogo y especialista en imágenes cardiovasculares, fundamenta la importancia de la iniciativa: "Cuando el paciente se hace un estudio de resonancia magnética  está 40 minutos acostado y, después, quedan miles de imágenes para leer e interpretar. Dentro del procesamiento que tenemos que hacer, trazamos manualmente el borde interno de cada cavidad del corazón, el borde externo, cuándo está más relajado, cuándo está más contraído. A partir de eso, hacemos un montón de cálculos que le llevan al profesional, aproximadamente, veinte minutos por cada paciente. Si lo automatizáramos, en cambio, obtendríamos la información en segundos”.

Serafino recuerda que casi inmediatamente a que fue presentada la inquietud de Cintora, desde el ITT comenzaron a trabajar en la segmentación automática a partir de imágenes de resonancia magnética de corazón. “Esto solo pudimos hacerlo porque contábamos en el equipo con la experticia del especialista, el doctor Federico Cintora. Es importante recalcar que, en cualquier área en la que vayamos a trabajar, necesitamos de la persona con la expertice adecuada para que nos diga qué buscar, dónde buscarlo y por qué buscarlo. En base a eso, informáticos, técnicos y especialistas, podemos hallar las herramientas necesarias para alcanzar esa solución”, añade Serafino, profesora de Procesamiento Digital de Imágenes en la carrera de Ingeniería en Sistemas de la UNNOBA.

Federico Cintora, exdirector del Consejo de Eco Doppler Cardíaco y Vascular de la Sociedad Argentina de Cardiología, fundador y actual secretario Científico del Consejo de Salud Digital de la Sociedad Argentina de Cardiología, valora: “Fuimos con un problema real y el equipo de la Universidad se puso a trabajar en la solución. Luego, hicimos un estudio de factibilidad para conocer las posibilidades reales de aplicación".

Resonador del Sanatorio Junín, donde se toman parte de las imágenes que se incorporan a DARMIC y que forman parte del proyecto.

En base a los buenos resultados que obtuvo este estudio, el grupo de investigación ganó el Primer premio al mejor trabajo de investigación en el IX Congreso Argentino de Imágenes Cardiovasculares, en 2021. “El proyecto piloto fue muy exitoso, dado que se logró desarrollar y entrenar un modelo de inteligencia artificial que identificó con gran precisión distintas partes del corazón, como los ventrículos y el músculo cardíaco. Además, permitió realizar mediciones sin intervención humana, las cuales eran muy similares a las realizadas por un médico experto en esa tarea".

Innovación en salud cardíaca

Para el entrenamiento de modelos de inteligencia artificial se necesitan una gran cantidad de información o datos, que son los que usa el modelo para aprender a realizar determinada tarea. “Estos datos son la clave para el éxito: si los datos son pocos o no son de buena calidad, el aprendizaje del modelo será defectuoso y no será de utilidad cuando se enfrente a situaciones de la vida real”, explica Sandra Serafino, quien recientemente presentó su tesis en la carrera de posgrado Especialización en Computación Gráfica e Imágenes y Visión por Computadoras (UNLP).

“En el caso de nuestro modelo —agrega Serafino— los datos que necesitamos son imágenes de resonancia magnética de corazón que ya estén analizadas por expertos, con las cuales el algoritmo aprende cuál debe ser el resultado de la tarea que se le propone. Es importante subrayar que la cantidad de imágenes necesaria es inmensa, hablamos de decenas de miles de imágenes".

Por eso, durante 2022 y 2023 se avanzó en un convenio entre la UNNOBA y la Sociedad Argentina de Cardiología para involucrar como participantes a instituciones y a médicos cardiólogos especialistas en resonancia cardíaca de todo el país que puedan aportar imágenes de estudios del corazón con el fin de reunir el material necesario para "entrenar" el modelo a gran escala.

Finalmente, en octubre de 2023 se llevó a cabo la firma del convenio entre ambas instituciones y se elevó el proyecto para aprobación por un Comité de Ética Independiente. A principios de diciembre del año pasado, entonces, se obtuvo la aprobación del protocolo de investigación, que implica recopilar las imágenes provenientes de todo el país para ser procesadas en el laboratorio del ITT.

Página de acceso a DARMIC para la carga de imágenes de resonancia magnética cardíaca, por parte de las instituciones participantes del proyecto.

Fue en enero de 2024 cuando comenzaron a recibir estas imágenes desde centros de diagnóstico cardiológicos de distintas regiones. El convenio con la Sociedad Argentina de Cardiología permite incorporar estudios y datos (Dataset) de resonancia cardiaca de Salta, Tucumán, Bariloche, Mendoza, Neuquén, Bahía Blanca, Mar del Plata, Capital y de cada lugar en donde la sociedad tiene socios y miembros activos.

Este proyecto logró concretar el Primer Dataset Argentino de Imágenes de Resonancia Magnética Cardíaca (DARMIC) con datos etiquetados por especialistas y normalizado para el entrenamiento de los modelos de inteligencia artificial.

IA: avances, desafíos y oportunidades

¿En qué trabaja, específicamente en este proyecto, el grupo de investigación de la UNNOBA? En desarrollar y entrenar modelos de inteligencia artificial que analizan automáticamente imágenes de resonancia magnética del corazón con la misma o mayor precisión que un cardiólogo experto en la tarea.

Machine learning significa "aprendizaje automático", máquinas que aprenden. “Dentro de machine learning, nosotros estamos usando una técnica particular de inteligencia artificial que se llama Deep Learning (aprendizaje profundo) mediante el uso de redes neuronales. Y, en particular, un subtipo específico que son las redes neuronales convolucionales", explica la docente e investigadora.

La información que da Serafino es absolutamente técnica, aunque se esfuerza en que se entienda la amplitud del desarrollo: "Mediante técnicas computacionales destinadas a lograr inteligencia artificial, otorgamos a las máquinas la capacidad de aprender reglas o detectar patrones sin ser explícitamente programadas para ello. ¿Qué son las redes neuronales? Son algoritmos computacionales compuestos por una serie de lo que podríamos llamar 'neuronas' (o sea, funciones lógicas y/o matemáticas) las cuales están interconectadas para procesar y transmitir datos a través de conexiones ponderadas numéricamente. Esto les permite realizar tareas complejas, como clasificación o segmentación de datos, y tomar de decisiones. Las redes neuronales convolucionales son un tipo de red neuronal particular que tienen gran capacidad para el análisis de datos en forma de imagen".

Este es el tipo de algoritmo que se utiliza en el proyecto para construir los modelos de inteligencia artificial, y que surge luego de probar varias arquitecturas de redes neuronales convolucionales en cada trabajo previo, para detectar cuál es la arquitectura que mejor se ajusta a las necesidades que existen. Serafino destaca que en el trabajo de investigación participan alumnos e ingenieros graduados de la Universidad.

Imagen del resultado en el proceso manual de segmentación llevado a cabo por un médico cardiólogo especialista, luego de la realización del estudio de RMI.

Ventajas para los cardiólogos especialistas en imágenes

Entre las ventajas de esta herramienta, una de las más importantes es la eficiencia: el método automático puede hacer esa tarea en escasos segundos, mientras a un especialista le lleva, en promedio, de 15 a 20 minutos. Por otro lado, la reproducibilidad: los sistemas automáticos no se distraen ni se cansan como los humanos. De esta manera, su precisión será la misma al inicio que al final de la jornada y no dependerá del grado de concentración en la tarea. Finalmente, la curva de aprendizaje de un médico especialista lleva meses o años para alcanzar un alto nivel de rendimiento en la tarea, mientras que un sistema automático se entrena en horas, o pocos días, y adquiere el nivel de desempeño de un experto con años de experiencia.

La generación del actual proyecto sirvió de base para la búsqueda de subsidios mediante la presentación a la Convocatoria sobre Abordajes Integrales en Inteligencia Artificial y Ciencia de datos (PICTO-IA), correspondiente a la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i) con fuente de financiamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). “En febrero de 2024 pudimos armar un proyecto integral llamado 'Desarrollo de una herramienta de diagnóstico en resonancia magnética cardíaca basada en inteligencia artificial entrenada con datos de población argentina'”, detalla la investigadora.

El proyecto se presentó en conjunto con otros dos nodos tecnológicos, conformando un futuro grupo de investigación y desarrollo interdisciplinario a nivel nacional integrado por la Universidad Nacional de La Matanza (representada por el Lic. Marcelo Juárez), el grupo Intecnus (conformado por investigadores del Instituto Balseiro de Bariloche y la Comisión Nacional de Energía Atómica, representado por el Dr. Flavio Colavecchia) y el ITT, perteneciente a UNNOBA, representado por la Lic. Sandra Serafino.

Imagen del mismo proceso realizado por inteligencia artificial en forma automática.

“El objetivo de este proyecto es el desarrollo de una solución informática basada en IA para segmentación automática de cavidades cardíacas y análisis del movimiento y la deformación miocárdica en estudios de resonancia cardíaca. El resultado será la generación, también automática, de un informe clínico preliminar preciso y reproducible, con el beneficio de optimizar las herramientas de diagnóstico clínico y mejorar la calidad de la información disponible en la consulta del paciente. De esta manera, apuntamos a mejorar la productividad, calidad y eficiencia operativa de los servicios que cuenten con este desarrollo”, puntualiza Serafino.

Una de las cuestiones que los integrantes del equipo multidisciplinario subrayan es la posibilidad de abordar la problemática presentada en su totalidad: desde la recolección de datos de estudios de resonancia magnética cardíaca de centros de diagnóstico de todo el país, pasando por la experiencia en el análisis automatizado de imágenes de resonancia cardíaca basado en IA, hasta llegar a la etapa final de desarrollo de soluciones informáticas dedicadas a optimizar procesos en el campo de la salud.


Murciélagos, claves para el equilibrio ambiental

Por Gricelda Incerti

Los murciélagos, mamíferos voladores, se han ganado muy mala fama a lo largo de la historia. Su naturaleza nocturna y su aspecto los han encasillado como seres aterradores.

Su figura de máquina voladora del Renacimiento, su negro e impreciso color, su penetrante y agrio chillar e incluso su extraña forma de dormir, son elementos suficientes para que en su entorno se levantara la fábula del pavor y el artilugio del espanto.

Para la mayoría de las personas estos animales evocan historias de casas encantadas, cementerios y vampiros sedientos de sangre. Pero las verdades  son tan fascinantes como los mitos de los que se ven rodeados. Los murciélagos, lejos de ser los monstruos de las leyendas populares, tienen  una importancia capital para la vida de nuestro planeta. Estos animalitos, también conocidos como quirópteros, son fundamentales para el equilibrio de nuestro hábitat.

"Los murciélagos cumplen un rol fundamental en la conservación de los ecosistemas de donde habitan y eso es debido a su diversidad de hábitos alimenticios”.  Con esta afirmación, Diana Acosta, doctora en ciencias veterinarias, derriba cualquier mito y pone en valor la preservación de la especie.

La doctora Acosta se desempeña en el CeBio (Centro de Bioinvestigaciones), donde desarrolla su tesis posdoctoral, dirigida por la doctora Mónica Díaz (investigadora del  CONICET y una los grandes referentes sobre el estudio de murciélagos de todo el país) y el doctor Mariano Merino (docente de la UNNOBA e investigador de la Comisión de Investigaciones Científicas). Acosta, además, es docente de las materias  Genética de Población y Evolución en la UNNOBA.

Los murciélagos consumen insectos y pueden funcionar como controladores biológicos de plagas, ayudando a preservar los cultivos. Por ejemplo, en la planta de maíz, la mantiene, hasta cierto punto, libre de plagas. También participan activamente en la dispersión de semillas y en la polinización de ciertas especies vegetales. No debemos verlos ajenos a nuestra vida”, señala Acosta, quien actualmente se encuentra, junto a su equipo, en la búsqueda e identificación de diferentes especies: “Es fundamental detectar las especies que se encuentran en cada región y conservarlos en dicho ambiente. Si nosotros identificamos y conservamos a las especies que habitan en el noroeste de Buenos Aires, se podría reducir muchísimo el consumo, por ejemplo, de agroquímicos, que es otra de las grandes problemáticas que hay en esta región”

 

En la búsqueda de nueva especie

Dra. Diana Acosta. Investigadora en el CeBio (Centro de Bioinvestigaciones),

El interés de la investigadora por los murciélagos se inició en su tesis de grado, dentro de la Licenciatura en Genética, de la UNNOBA,  en la que comenzó a estudiar las distintas especies. Actualmente, identifica especies dentro del género Molossus (murciélago mastín común),  de la familia Molosisdae, que se encuentra en América, desde Argentina hasta Cuba y México,  y en los  Cayos de Florida, en Estados Unidos.

"Llevamos a cabo la identificación taxonómica de esta especie, dado que tiene una amplia distribución a lo largo de América y muestra considerable variación, lo que dificulta la identificación precisa de la misma”, relata la investigadora y explica de qué se trata reescribir la especie: “Hay mucha variación morfológica. La clasificación taxonómica clásica, por así decirlo, se basa en caracteres morfológicos en donde se dice: esta especie tiene tales rasgos morfológicos, medidas de cráneo, coloración del pelo, tamaños de brazos, etc. El tema, es que este género presenta gran diversidad morfológica a lo largo de toda su distribución geográfica. Con el avenimiento de las técnicas moleculares se empezaron a hacer algunos estudios y vieron que muchas de las especies que se consideraban como una única especie, con estas técnicas, no lo eran. Eso fue como un puntapié para empezar a reescribir las especies que ya están conocidas como tales. La investigación actual es trabajar con este género y validar si las especies que están reconocidas, particularmente en Argentina, son esas o existen nuevas”.

 En Argentina, existen actualmente cuatro especies identificadas, de las cuales dos de ellas están en nuestra región y en los ambientes urbanos, como en nuestras ciudades. Agarrados de la ventana, de los taparollos o volando en las plazas, son los que solemos ver y tanta aversión nos causan.

“Identificar nuevas especies constituye un gran logro, no solamente a nivel profesional, sino por la biodiversidad. Es fundamental poder determinar y conocer todas las especies que tiene nuestro país para poder llevar medidas de conservación. Porque también, algo no menor, es que los murciélagos son un grupo de mamíferos muy vulnerados. Es un grupo en donde está muy poco estudiado y por ende, las medidas de conservación son casi nulas. Es fundamental poder fomentar la identificación de especies para después poder detectar su grado de vulnerabilidad, conocer si están en peligro de extinción y poder llevar a cabo planes de manejo que las conserven”, manifiesta la científica.

La falta de carisma de este mamífero volador hace que se tienda a repeler la presencia y a que no importe si se elimina a la especie específica. El Programa de Conservación de los Murciélagos de Argentina (PCMA) es una Fundación integrada por investigadores, estudiantes y miembros de la comunidad interesados en conocer y conservar a los murciélagos de Argentina. Asimismo, forma parte y ha impulsado la creación de la Red Latinoamericana y del Caribe para la Conservación de los Murciélagos (RELCOM), que hoy incluye 23 programas de conservación en 25 países de América Latina y el Caribe. La misión de RELCOM es garantizar la persistencia de especies y poblaciones saludables y viables de murciélagos en la región y lograr que en todos los países se conozca y aprecie su importancia. ( Ver más, acá: http://pcma.com.ar/)

El equipo de investigación se encuentra realizando la identificación de especies de murciélagos insectívoros que habitan en el Noroeste de Buenos Aires.

Diana Acosta también es contundente con esta línea: “Es absolutamente necesario informar para qué están en nuestro ecosistema, por qué son tan importantes y por qué es tan significativo conservarlos. Hay un montón de medidas que podemos tomar para sacarlos de nuestras casas que no sea matándolos, como, por ejemplo, la colocación de redes que se colocan fuera de las ventanas”.

Diana Acosta se encuentra realizando la identificación de especies de murciélagos insectívoros que habitan en el noroeste de Buenos Aires. La investigación,  pionera en nuestra región, se realiza en conjunto con biólogos de otras partes del país.

Pasión por los murciélagos

La especie que estudia Acosta, generalmente, tiene hábitos urbanos. Se pueden encontrar en casas, techos, debajo de puentes o arriba de los árboles. Sus integrantes viven colonias de hasta cientos de individuos, en grupos familiares estables a lo largo de los años, o bien, en soledad.

Normalmente, tienen una sola cría por hembra al año, pero en el trópico es común que algunas especies tengan dos períodos reproductivos. Después de un período de gestación variable, la hembra tiene la cría en el refugio y, en cuanto sale, se cuelga de su pezón, y allí permanece  dos alrededor de meses, lactando, aunque en el último período es más independiente, realizando vuelos cortos y empezando a comer alimentos. Las hembras los cargan hasta las áreas de alimentación y mientras comen, les dejan en alguna rama segura.

 

Los murciélagos son los únicos mamíferos capaces de volar. De vida nocturna, suelen descansar cabeza-abajo en cuevas o lugares oscuros durante el día, y durante la noche salen a alimentarse.

Los murciélagos son animales de hábitos nocturnos y vista poco desarrollada. La mayoría de las especies en este orden son capaces de emitir sonidos de muy alta frecuencia y de recibir sus ecos, cuando estos chocan contra los objetos. Gracias a este sofisticado mecanismo, conocido como ecolocalización, son capaces de volar y encontrar su alimento en la mayor oscuridad.

¿Qué fue lo que sedujo a la científica de estos mamíferos, catalogados como “príncipes de las tinieblas”? “Lo primero que a mí me sorprendió fue la capacidad evolutiva que tuvo la especie, partiendo, por ejemplo, de que es el único mamífero volador. Que sus alas, son nuestras manos. Desde los orígenes evolutivos, me parece que es maravilloso y luego, si hablamos de las particularidades de cada especie, todas las adaptaciones que tienen, como los distintos tipos alimenticios. En definitiva, a mí me gusta mucho la evolución, y los murciélagos son eso  'pura evolución'”, manifiesta Acosta y agrega: “Es otro mundo, es otro universo”.

“Quiero destacar, además, que cumplen un rol fundamental en el control de plagas de insectos, sin generar daños al ambiente. Por ejemplo, eliminan los mosquitos, que muchas veces son portadores del dengue, chikungunya y otras enfermedades. De hecho, generalmente en las plazas, ¿viste en pleno verano que es una locura de bichos alrededor de las luces, las chicharritas y otros insectos más? Ellos van y se los comen.  Para mí, la clave es la divulgación de los beneficios ecosistémicos que tienen, respetando y aceptando que no a todo el mundo les gustan, pero fomentando que no los maten”, añade la investigadora.

Murciélagos y rabia

Como la mayoría de los animales silvestres, los murciélagos transmiten varias enfermedades, entre ellas, la rabia.  Sobre este tema particular la investigadora aconseja: “La primera cuestión a tener en cuenta es que si se ve un murciélago que está tirado en el piso, vivo, es muy probable que tenga rabia. ¿Por qué te digo esto? Porque los murciélagos que tienen rabia, pierden la capacidad de volar. Entonces, generalmente se caen. Mi consejo a toda la comunidad, es que cada vez que vean un murciélago en el piso, no lo toquen o llamen al área de zoonosis para que los retire. El murciélago no nos contagia la rabia, sino que se la contagia o otro animal, sobre todo doméstico . Son esos animales domésticos los que nos transmiten a nosotros las enfermedades.  Por eso, es fundamental también vacunar anualmente a nuestras mascotas, que es obligatorio y gratuito”.

La educación pública como estandarte

Durante toda la entrevista Diana hizo referencia a su formación, su lugar de trabajo y su defensa hacia la educación pública: “Toda mi formación fue pública sino, no hubiera podido estar donde estoy. Mis inicios fueron en la Escuela Primaria N°62, en mi barrio Villa Progreso, una escuelita humilde donde me enseñaron muchos valores. Luego, fui a la Escuela Agrotécnica, también, un lugar donde aprendí de ética y  valores, y particularmente me dio la pasión por toda la parte natural. De allí salió mi vocación. Luego comencé en la UNNOBA la Licenciatura en Genética. Esta Universidad me otorgó muchas herramientas tanto profesionales como personales. Mi doctorado lo realice mediante una beca del CONICET, en la Universidad Nacional de Rosario. Estoy muy agradecida a todo el sistema público por formarme y por darme la posibilidad de estar donde estoy porque si no, no hubiera podido. Ahora estoy devolviendo lo que me dieron, dando clases, publicando y transmitiendo conocimiento y ciencia donde sea necesario.”

 

Publicaciones (orden cronológico):

- ACOSTA, D. B.; PINARDI, E.; MERINO, M. L. 2023. First record of leucism in two species of insectivore bats (Chiroptera) from San Luis province, Argentina. Revista: NOTAS SOBRE MAMÍFFEROS SUDAMERICÁNOS.

- ACOSTA, D. B.; ZANOCCO, F. A.; RUÍZ, M.; SANCHEZ, J. P. 2023. Domestic dogs as host of ectoparasites carrying Rickettsia, Bartonella and Mycoplasma in urban, peri-urban and rural areas from Center Argentina. Revista: MASTOZOOLOGíA NEOTROPICAL.

- ACOSTA, D. B.; FIGUEROA, C. E.; FERNÁNDEZ, G. P.; MAC ALLISTER, M. E.; CARPINETTI, B. N.; PEREZ GIANMARCO, L.; MERINO, M. L. 2023. Evidence of hybridization between wild boars and feral pigs (Sus scrofa) from Argentina: implications for the success of the invasion process. Revista: BIOLOGICAL INVASIONS.

- FIGUEROA C. E.; ACOSTA D. B.; MAC ALLISTER M.; MERELE, M.; FERNÁNDEZ, G. P.; CARPINETTI, B. N.; WINTER, M.; ABATE, S.; BARANDIARAN, S.; MERINO M. L. 2022. Patterns of genetic variation on wild pig (Sus scrofa) populations over a complete range of the species in Argentina. Revista: MAMMALIA.

- ACOSTA, D. B.; ESPAÑOL, LAUREANO A.; FIGUEROA, C. E.; MARINI, S.J.; MAC ALLISTER, M. E.; CARPINETTI, B. N.; FERNÁNDEZ, G. P.; MERINO, M. L. 2021. Wild pigs (Sus scrofa) population as reservoirs for deleterious mutations in the RYR1 gene associated with Porcine Stress Syndrome. Revista: VETERINARY AND ANIMAL SCIENCE.

- RUIZ, M.; ACOSTA, D. B.; BARICALLA, A.; SÁNCHEZ, J. P. 2021. Molecular detection of Rickettsia in ectoparasites (Siphonaptera and Phthiraptera) of domestic and feral pigs from Argentina. Revista: PARASITOLOGY RESEARCH.

- ACOSTA, D. B.; RUIZ, M.; SANCHEZ, J. P. 2019. First molecular detection of Mycoplasma suis in the pig louse Haematopinus suis (Phthiraptera: Anoplura) from Argentina. Revista: ACTA TROPICA.

- ACOSTA, D. B.; FIGUEROA, C. E.; FERNÁNDEZ, G. P.; CARPINETTI, B. N.; MERINO, M. L. 2019. Genetic diversity and phylogenetic relationships in feral pig populations from Argentina. Revista: MAMMALIAN BIOLOGY.

- SAGUA, M. I.; FIGUEROA, C. E.; ACOSTA, D. B.; FERNÁNDEZ, G. P.; CARPINETTI, B. N.; BIROCHIO, D.; MERINO M. L. 2018. Inferring the origin and genetic diversity of the introduced wild boar (Sus scrofa) populations in Argentina: an approach from mitochondrial markers. Revista: MAMMAL RESEARCH.

 


Tecnología y salud de la mano

 

Por Gricelda Incerti

La incorporación de simuladores de alta fidelidad en la enseñanza de la enfermería constituye una práctica educativa que tiende a extenderse en razón de constituir un entorno  favorable para el desarrollo de habilidades en las y los estudiantes, además de aportar condiciones éticas de mayor seguridad en el paciente.

Estas tecnologías ofrecen nuevas posibilidades educativas en la formación de enfermería, ya que incorporan un dispositivo que incluye hardware y software, lo que hace factible la construcción de diversos escenarios ofreciendo situaciones de complejidad gradual y creciente, acordes a las características y necesidades del nivel formativo por el que atraviesan los alumnos.

En agosto de 2022 la UNNOBA adquirió un simulador de comunicación, llamado Alex, con apariencia de ser humano adulto. Alex interactúa con estudiantes en tiempo real, simulando ser un paciente. Eso permite poner en práctica ciertas maniobras de un modo casi real para las y los estudiantes. La llegada de Alex, primero con estas características en nuestro país, imprimió desde ese año el desarrollo de acciones de formación y capacitación para profesionales y estudiantes del equipo de la salud. Pero el Instituto Académico de Desarrollo Humano (IADH) y el Instituto de Investigación y Transferencia en Tecnología (ITT) de la UNNOBA no se conformaron con tener sólo a Alex y apostaron al diseño, elaboración y validación de un modelo de simulador de bajo costo para prácticas de enfermería.

En el año 2022 la UNNOBA adquirió un simulador de comunicación, llamado Alex, con apariencia de ser humano adulto.ALEX representa un paciente masculino de 160 cm, y pesa aproximadamente 54 kg.

En el Laboratorio de Simulación de Enfermería "Nélida Yaryour" se lleva a cabo el proyecto, que no solo tiene por finalidad la concreción de un simulador, sino establecer vínculos científico-académicos entre las carreras de Licenciatura en Sistemas, Ingeniería en Informática, y la Licenciatura en Enfermería.

Este trabajo de carácter interdisciplinario, actualizará, diseñará y validará hardware y software para un modelo de simulador de baja funcionalidad, con el propósito de convertirlo en uno de mayor complejidad, que se adecue a las necesidades curriculares de la carrera de Licenciatura en Enfermería, en busca de enriquecer los procesos de enseñanza y aprendizaje de la mencionada licenciatura.

La Magíster Paula Lencina y la Licenciada Naián Luhaces dirigen el proyecto de diseño, elaboración y validación de un modelo de simulador de bajo costo para prácticas de enfermería.

Bajo la dirección de Paula Lencina (investigadora en el ITT  e integrante del equipo capacitador de Educación Digital de la UNNOBA), y la codirección de la Naián Luhaces (docente de la UNNOBA y coordinadora del Laboratorio de Enfermería) se lleva a cabo el proyecto dentro del programa de Promoción de la Investigación Científica. Ambas coinciden en que es un desafío muy grande  unir la tecnología, con una de las ciencias más humanas, como la enfermería.

“Esta propuesta nos entusiasma, nos convoca, y realmente estamos absolutamente agradecidos de poder trabajar en un espacio de investigación de esta envergadura, porque realmente lo hacemos con mucho entusiasmo. Lo que estamos haciendo concretamente en nuestro proyecto, es trabajar en un simulador con el fin de incorporar software que se desarrolle, por parte de estudiantes avanzados de las ingenierías y la informática”, sostiene la magíster Lencina.

 

Equipo interdisciplinario entre profesionales de informática y salud

En el proyecto básicamente se trabaja en un simulador, con el fin de incorporar software que se desarrolla por parte de estudiantes avanzados del área de informática de la universidad en conjunto con estudiantes de las carreras de enfermería.
El área de enfermería asesora al área de informática en cuanto a los requisitos que debe cumplir el simulador para que logre el mayor realismo posible. Finalmente se probará el simulador, poniéndose en práctica con estudiantes en cámara Gesell, realizando las mediciones y ajustes correspondientes al diseño.
“Actualmente estamos trabajando en el ingreso al panel de control para estudiantes y docentes. En ese sentido el docente podrá modificar los signos vitales, iniciar las sesiones de maniobras RCP (reanimación cardiopulmonar) para monitorear en tiempo real y ejecutar cambios presentados de taquicardia y otras patologías en el pulso cardíaco. Por otra parte, el estudiante tendrá un 'acceso fácil' mediante código QR para revisar signos vitales y monitorear las maniobras, pero no podrá ejecutar acciones sobre el maniquí”, afirma Lencina.

Parte de los estudiantes de las carreras de informática y enfermería se incorporaron a la puesta en marcha del proyecto.

Doce docentes, investigadores e investigadoras de la universidad y nueve estudiantes de las carreras de informática y enfermería se incorporaron a la puesta en marcha del proyecto.

“En la última década, en la formación de enfermería se han implementado nuevos modelos y herramientas pedagógicas, entre ellas la simulación clínica”, cuenta la licenciada Naián Luhaces, a lo que agrega: “La simulación, es una estrategia de enseñanza dinámica y reflexiva que facilita la participación activa de estudiantes e integra conocimientos teóricos y prácticos. La tecnología utilizada en la simulación clínica puede presentarse como una desventaja o un obstáculo, dado que los recursos —denominados simuladores de baja, mediana o alta fidelidad— son muy costosos”.

“Nosotros contamos con simuladores de baja y mediana fidelidad, pero no disponemos de simuladores de alta fidelidad, para generar instancias de aprendizajes más complejas en escenarios de alto realismo. Por lo tanto, es necesario implementar vínculos con diferentes áreas de la universidad, para minimizar costos, en el objetivo de subsanar esta carencia”, fundamenta la coordinadora del laboratorio de Enfermería.

Luhaces reafirma la importancia de los beneficios de la Simulación Clínica en educación: “Como esta técnica crea una situación o ambiente determinado, permite que los alumnos experimenten una representación de un evento real y así se generan espacios de práctica de habilidades, situaciones de evaluación y pruebas de ciertos conocimientos que se abordan en las carreras de un modo más pedagógico”.

 

Objetivos del proyecto

Paula Lencina sintetiza en tres ítems los objetivos del proyecto: “Por un lado se trabaja en forma interdisciplinaria entre el área de informática y enfermería, para que a partir de ahí se genere un prototipo que sirva para las prácticas del laboratorio de la UNNOBA, y que además se pueda compartir con el resto de las universidades del país; y fundamentalmente reduciendo los costos de obtener un simulador para trabajar con Simulación Clínica en la UNNOBA”.

Teniendo en cuenta que Alex es costoso, movilizó la cuestión económica replicando un simulador de bajo costo y con componentes argentinos. “Nosotros queremos generar un simulador de bajo costo porque los simuladores de alta complejidad son de costo elevado”, explica la investigadora y continúa destacando la importancia del trabajo conjunto: “Es importante destacar la validación de simulador. Los que entran en juego ahí fuertemente son los estudiantes de enfermería porque ellos justamente nos ayudan a validar el simulador”.

Por otra parte, en este espacio de investigación, alumnos y alumnas de informática pueden aplicar todo lo que aprendieron en un proyecto real. “Puntualmente, en un simulador que ellos están programando”, subraya Lencina, sin dejar de mencionar que “no dejamos de remarcar el espíritu de devolverle a la universidad pública lo que nos brindó. Este diseño es muy bueno tenerlo en nuestra Universidad y poder compartirlo con otras Universidades del país y, quién te dice, comercializar alguna parte del mismo”.

El equipo de trabajo está conformado por doce docentes: Juan Pablo Beloso, Pablo Luengo, Carla Vidal, Evangelina Chavero, Patricia López, Paula Chintio, Raquel Perdomo, Daniela Díaz, Cintia Moyano, Micaela Tolosa, Valeria Maggini y Sebastián Nievas; seis estudiantes de la Licenciatura de Informática: Elías Uribe Curapil, Felipe Lucero, Benjamín Roques, Mateo Ezequiel Hernández, Matías Fochi y Walter Quintero; y tres estudiantes de la Licenciatura en Enfermería: Juliana Medina, Josefina Luengo y Mariana Tura.

Con un avance de un 65 por ciento, el simulador aún no tiene nombre ni sexo. Estos datos saldrán de sus propios creadores cuando terminen de reproducir un diseño semejante al que enfrentarán los y las estudiantes en la cotidianeidad de su profesión.

 

 


Humedal artificial para tratamiento de desechos cloacales

 

Por Gricelda Incerti

La localidad de Morse pertenece al partido de Junín y se encuentra a 30 km de la ciudad cabecera, tiene aproximadamente 2000 habitantes y tomó el nombre de la estación inglesa Buenos Aires al Pacífico que se llamaba Morse en homenaje a Samuel Morse, inventor del telégrafo, sistema de comunicación fundamental en los orígenes ferroviarios.

Región netamente agropecuaria, desde 1996 Morse celebra la Fiesta Provincial del Cosechero. Fue en julio de 2021 que se creó el primer almacén y bar autóctono que enaltece el patrimonio histórico, cultural y gastronómico local. “El Terruño” fue recomendado entre los 8 lugares de la provincia de Buenos Aires para comer locro patrio el 25 de Mayo.

Pese a todo este bagaje sociocultural, Morse no posee red colectora cloacal ni planta depuradora. Las aguas residuales de cada domicilio se vierten en pozos absorbentes (o pozos ciegos) que son vaciados periódicamente con camiones atmosféricos, recolectando aproximadamente 6000 litros/día de desechos cloacales. Muchas ciudades y pueblos rurales bonaerenses sin servicios cloacales utilizan estos pozos como tecnología de disposición de las aguas residuales domésticas. En suelos arcillosos, los pozos se impermeabilizan por el contenido de grasas y jabones, aumentando la necesidad de ser vaciados frecuentes por camiones atmosféricos. Los líquidos extraídos poseen concentraciones elevadas de contaminantes (materia orgánica, nutrientes, patógenos) y son volcados en plantas de tratamiento que no están diseñadas para recibirlos.  O, clandestinamente, se vacían en ríos o arroyos. Esta situación, sumada a otras descargas de aguas residuales domésticas con nulo o escaso tratamiento, contamina las aguas de ríos, lagunas y napas, afectando su utilización para actividades recreativas, pesca, riego, agua de consumo.

El Laboratorio de Limnología, Centro de Investigaciones y Transferencia del Noroeste de la Provincia de Buenos Aires (CITNOBA, UNNOBA-UNSAdA-CONICET), en colaboración con el Municipio de Junín, la Delegación Municipal y la Cooperativa de la localidad de Morse están impulsando un ensayo a escala piloto, utilizando humedales artificiales para tratar parte del material extraído por los camiones atmosféricos de Morse. La información obtenida en este experimento servirá para el diseño de un humedal artificial, adaptado a las condiciones de la región, a escala para toda la población de Morse.

El proyecto fue presentado y seleccionado como uno de los ganadores del concurso Aguas Claras 2022 de la Fundación Bunge y Born, que busca financiar y escalar ideas-proyecto que conecten la ciencia con problemáticas reales del agua como recurso, hábitat y agente de daños, sinergizando la producción de conocimiento y la búsqueda de soluciones transformadoras. Como consecuencia de ello, el proyecto recibió el apoyo económico y asesoramiento a nivel proyectual para llevarlo a cabo. Ver más, acá

“Esta idea-proyecto propone ensayar una tecnología ecológica, de bajo costo e impacto ambiental para la gestión de los lodos extraídos de pozos absorbentes, replicable en muchos lugares del país. Para este tratamiento, utilizamos una tecnología, llamada lecho de secado con plantas, que no es más que un humedal artificial de flujo vertical”, explica la doctora Romina Schiaffino, investigadora (CONICET, CITNOBA, UNNOBA-UNSAdA) y docente de la UNNOBA.

Schiaffino señala que el humedal está formado por un "medio poroso de piedras de distintos tamaños y arena, y plantas acuáticas en la superficie, que sirven para filtrar los contaminantes". “Estamos ensayando estos lechos a pequeña escala y realizando la parte experimental para ver si eso funcionan bien en estas latitudes, con este tipo de clima, y con el tipo de desechos cloacales que vamos a probar”, comenta.

El objetivo general del proyecto es abordar el tratamiento de residuos cloacales extraídos por camiones atmosféricos, utilizando la tecnología de humedales artificiales, para prevenir la contaminación de suelos, aguas subterráneas y superficiales. Los objetivos específicos son: reducir los sólidos provenientes de las descargas cloacales mediante la separación del agua de los lodos, reducir las concentraciones de fósforo total, nitrógeno total y microorganismos patógenos en el agua, y analizar las características físicas, químicas y microbiológicas de los sólidos acumulados al final del ensayo.

 Una solución sostenible

Un lecho de secado con plantas (LSP) es un humedal artificial formado por una estructura de hormigón que contiene piedras de distintos tamaños, arena y plantas en su superficie. Está ubicado en la localidad de Morse, en la entrada al predio del basural.

 

La tecnología LSP (Lecho de secado con plantas) utiliza humedales construidos/artificiales para separar los sólidos y los líquidos de los lodos y tratar ambas matrices por separado. En el ensayo piloto planteado, cada LSP recibe lodos de los camiones un día por semana. En los seis días de descanso entre aplicaciones, el agua infiltra y sale por el drenaje del fondo y los sólidos se acumulan y deshidratan en la superficie del humedal.

De esta forma se evalúa la eficiencia de saneamiento de los humedales mediante el análisis de muestras del agua de ingreso y de salida. Los resultados del ensayo, con el efluente real a tratar y bajo las condiciones climáticas de la zona, servirán como base para diseñar un sistema a escala para tratar todos los lodos de los camiones atmosféricos provenientes de la localidad de Morse mediante la tecnología de humedales artificiales.

¿Pero cómo se está armado técnicamente el pequeño humedal? Romina Schiaffino lo explica sencillamente: “Son dos pequeñas piletas hechas con paredes de ladrillos y fondo de cemento. Cada lecho tiene 2 x 2,5 metros (5 m2), y un metro de profundidad. En el fondo tiene un caño de PVC perforado que recibe los lixiviados o líquidos que se infiltran. Después vienen varias capas de piedra de distintos tamaños y en la superficie una capa de arena plantada con plantas acuáticas emergentes, juncos o totoras”.

La investigadora cuenta que se recomienda utilizar plantas nativas, adaptadas a las condiciones del lugar. “Una vez colocadas las plantas —explica— se riegan con lodos diluidos. Después de aproximadamente un mes de adaptación y estabilización, se puede comenzar el ensayo, que consiste en volcar lodos provenientes de los camiones atmosféricos en la parte superficial de cada lecho y, mediante análisis químicos y microbilógicos, evaluar cuánto mejora la calidad de los lixiviados”.

La tecnología de humedales artificiales se comenzó a utilizar entre los años setenta y ochenta en Estados Unidos y Europa para el tratamiento de aguas residuales. En Latinoamérica, en general y en nuestro país en particular, es una tecnología poco utilizada, a pesar de la extensión y disponibilidad de terreno con la que disponemos en la mayor parte de nuestro territorio. Lo novedoso e innovador en este proyecto es implementar y adaptar esta tecnología a las problemáticas locales, considerando su alta relación costo-beneficio económico, ya que no requiere insumos ni energía, tiene alta eficiencia y se integra bien al paisaje rural.

“Estos ensayos  van a permitir obtener los criterios de construcción y manejo del humedal artificial a escala real a construir en el futuro, es decir, que vamos a conocer qué dimensiones debe tener, la tasa de carga óptima, la eficiencia de saneamiento que se puede obtener con esta tecnología”, especifica Schiaffino, líder del proyecto.

 

El reto del tratamiento de las aguas contaminadas

Los humedales conforman un tipo de ecosistemas únicos, donde el medio acuático y el terrestre se funden y dan lugar a un sinfín de procesos biogeoquímicos. Para aprovechar las capacidades de estos ecosistemas naturales, desde hace décadas se construyen humedales artificiales (constructed wetlands, en inglés) con el fin de depurar aguas residuales urbanas e industriales.

“La falta de tratamiento de las aguas residuales domésticas es un problema que atraviesa a la Argentina y a toda Latinoamérica, y afecta no sólo a las poblaciones rurales sino también a la periferia de las grandes ciudades. La idea con este tipo de proyectos es reducir la contaminación de suelos, aguas subterráneas y superficiales. Son desechos que generamos nosotros, así que tenemos que ser conscientes de ello y buscar soluciones apropiadas”, enfatiza Schiaffino.

 

Un proyecto colaborativo

Parte del equipo multidisciplinario, integrado por funcionarios, investigadores, profesionales, y ciudadanos de la comunidad.

 

Para llevar a cabo este proyecto se formó un equipo multidisciplinario, integrado por funcionarios, investigadores, profesionales, y ciudadanos de la comunidad local. Cuenta con el apoyo logístico y colaboración de Perla Casella y Cecilia Laffaye, integrantes del área de Medio Ambiente, y de Franco Castellazzi de Obras Sanitarias de la Municipalidad de Junín, de Matilde Calaza delegada Municipal de Morse y su Cooperativa (Micaela Arias, Gerardo Potavez, Samuel Garbarini y Jorge Ciraulo) para la ejecución, cuidado y mantenimiento del ensayo piloto. El asesoramiento del doctor Alejandro Mariñeralera (Investigador CIC, Profesor de postgrado UNLP) especialista en humedales artificiales que participa en la planificación y construcción del humedal artificial piloto, su funcionamiento, mantenimiento y eficiencia. También colaboran Guillermina Nuozzi, Mara Sagua, Pía Quiroga, Fabián Correa y Antonella Viale, integrantes del Laboratorio de Limnología del CITNOBA (UNNOBA-UNSAdA-CONICET) para la realización de los análisis físicos, químicos y microbiológicos necesarios.

El viernes 28 de abril, en el Centro Cívico de Morse, se realizó el primer taller bajo el título "Posibles soluciones al tratamiento de desechos cloacales". Fue abierto a la comunidad. Los responsables informaron acerca del proyecto e intercambiaron opiniones con el público.

 


La UNNOBA y su impacto territorial

 

 

Por Gricelda Incerti

Las universidades constituyen un eslabón fundamental que contribuye al desarrollo. El trabajo articulado de las universidades, los gobiernos locales y las organizaciones representativas de la sociedad civil favorecen no solo una educación de calidad, sino también el diálogo necesario que implica actividades que se desarrollan pensando principalmente en su impacto territorial.

No existen dudas del rol que desempeñan las instituciones universitarias en el desarrollo económico y social de las naciones. Jacques Boudeville, especialista en economía de los territorios, decía que “la universidad es el cerebro de toda región, para apuntar la necesidad de todo territorio de recibir, adecuar y crear conocimiento”. En momentos en que el conocimiento, la innovación y la transferencia tecnológica constante se constituyen en el pilar del desarrollo de un territorio, se fortalece la función de la universidad como institución que contribuye a estos procesos.

No puedo dejar de ser autorreferencial. Porque muchos de nosotros estuvimos en los momentos fundacionales de la UNNOBA. Y esas imágenes, y esas palabras, nos han acompañado a lo largo de estos veinte años. Y vimos a los primeros estudiantes, y a los primeros graduados; y sabemos de los jóvenes, que, sin alternativa posible, hoy están insertos en el mercado laboral, gracias a los estudios superiores. Y también escuchamos a vecinos, amigos y familiares, estar orgullosos de pertenecer a la universidad. Y vi a mi padre, que un día con un cuadernito bajo el brazo, partió feliz a terminar de aprender el idioma de sus antepasados; y a nuestro diariero, que hoy con orgullo ostenta el título de abogado de la UNNOBA y el de ser el primer universitario de su familia.

 

Edificio "Alicia Moreau de Justo", actual sede de la Escuela de Tecnología. En este espacio funcionó primero el Centro Universitario Regional Junín, creado en 1990, y, posteriormente, el Rectorado de la Universidad (hasta 2012).

Quizá cabe citar las palabras del ingeniero Luis Lima, rector organizador, cuando en la ciudad de Pergamino se descubrió la piedra fundamental de la Universidad Nacional del Noroeste en el año 2003: “Para nosotros, uno de los grandes desafíos es ir formando una Universidad que realmente sea la primera que marque el camino en el siglo veintiuno. A veces las tradiciones universitarias que son buenas para muchas cosas, no lo son cuando uno tiene que innovar y ponerse en sintonía con los tiempos que corren. Tenemos el desafío de que esta Universidad del Noroeste se transforme en ese foco del siglo XXI que tuvieron las grandes universidades también en el momento de su nacimiento cuando fueron conducidas por los caminos adecuados” (Archivo Diario La Opinión, 21 de junio de 2003).

Invitación al acto inaugural de la sede Pergamino (agosto de 2006).

 

En agosto de 2006 se inauguró la sede Pergamino de la UNNOBA. En la nota de invitación al acto inaugural, firmada por el ingeniero Lima y el exintendente Héctor Gutiérrez, se destacaba: "Muchos son los desafíos que deberá afrontar la Universidad para cumplir su cometido, y dentro de ellos, los tres siguientes deberán ser políticas troncales de la transformación: la formación de ciudadanos capaces y comprometidos; el incremento de los desarrollos tecnológicos pertinentes y su transferencia; y el análisis de políticas de Estado que acompañen y potencien el cambio necesario”.

(Archivo Diario La Opinión. 11 de agosto de 2006)

Centro de Actividades Universitarias “Manuel Puig” en el partido de General Villegas.

El Proyecto Institucional, presentado en junio de 2004, señala distintas características de la propuesta educativa de la UNNOBA. Entre ellas se hace hincapié en la vinculación con instituciones de la zona de influencia de la Universidad: “La firma de convenios de colaboración con municipios y otras instituciones de la región, así como la constitución de redes para impulsar y concretar, de manera coordinada, acciones que tendrán como propósito el mejoramiento de la calidad de vida en la región a través de la resolución de los problemas más acuciantes, del planteamiento de iniciativas superadoras y de una sostenida ayuda a la construcción de un futuro mejor para todos"

Ver Documento Completo: Proyecto-Institucional-Completo- UNNOBA

A lo largo de estas dos décadas, la UNNOBA levantó la bandera de la educación pública, gratuita y de calidad y es punto de encuentro de miles de sueños, esperanzas, metas y oportunidades. Intendentes y representantes de la comunidad relatan este acontecimiento regional en primera persona.

Ricardo José Alessandro, intendente de Salto

“Confiamos en el prestigio de la universidad pública de nuestra zona para guiar el camino que ya estamos transitando”

La historia de los pueblos del interior de la provincia de Buenos Aires se forja lisa y llanamente al calor de la producción. Desde las décadas finales de siglo XIX, muchas comunidades que habían nacido como parte de la estrategia fundacional del Estado argentino, pasaron a ocupar un lugar de suma preponderancia con las mejoras en las técnicas productivas agropecuarias y la consolidación del sistema de transporte ferroviario, que abarató y agilizó el transporte de las materias primas obtenidas en el campo. Ese proceso dotó de una indeleble identidad productiva a cientos de pueblos, entre los que se encuentra Salto, sitio predilecto a raíz de la excepcional fecundidad de sus tierras.

Pero los tiempos cambiaron, la tecnología disminuyó la necesidad de mano de obra en el agro y durante largas décadas muchísimos jóvenes de nuestros terruños debían abandonar la “patria chica” buscando una posibilidad de crecimiento y formación personal y profesional, lo que es equivalente a decir "un futuro mejor".

Ante esta problemática y en una época plagada de dificultades como fue la década de 1990, quienes integrábamos el gobierno municipal decidimos, junto al invalorable empuje de la sociedad civil, llevar adelante un ambicioso y fundamental proceso de radicación de industrias en el distrito, que hoy, tres décadas después, son motivo de orgullo de nuestra región y generan miles de fuentes laborales directas, un sinnúmero de indirectas  y un contundente flujo de ingresos que impactan positivamente en la economía de la ciudad.

En esa misma línea, acompañamos a comienzos del presente siglo el nacimiento de la Universidad Nacional del Noroeste de la Provincia de Buenos Aires (UNNOBA), no solo por una cuestión de cercanía geográfica, sino porque, desde sus inicios, ya pudimos intuir como esta nueva casa de estudios superiores, ofrecía una gama de posibilidades a muchos saltenses que, de esta manera, podían planificar una vida profesional en nuestro distrito o, al menos, en ciudades vecinas ubicadas a pocos minutos de distancia. Pero el dinamismo cada mayor del mundo actual, llevó a que podamos concretar un sueño muy ambicioso y que permite estrechar en un solo brazo a aquellos dos componentes esenciales del ámbito productivo: el trabajo y el conocimiento. Por este motivo en 2019 suscribimos un importe acuerdo con la UNNOBA que posibilitó que se dicte en Salto la carrera de Tecnicatura en Mantenimiento Industrial, punto de partida de una conexión institucional que debe ampliarse y profundizarse.

La ciudad del presente y del futuro requiere acuerdos entre los diferentes actores sociales en pos de la inclusión social, la igualdad de oportunidades, el arraigo de nuestros ciudadanos y el desarrollo sustentable. Confiamos en el prestigio de la universidad pública de nuestra zona para guiar el camino que ya estamos transitando. El futuro ya llegó, no podemos dejar pasar la oportunidad.

Eduardo Campana, intendente de General Villegas

"La sede de la Universidad representa un desafío del presente"

En el mes de agosto de 2021 inauguramos el edificio “Manuel Puig”, sede local de la Universidad Nacional del Noroeste de Buenos Aires, que ofrece educación de calidad a quienes optan por profesionalizarse y eligen estudiar en General Villegas; no obstante, la trayectoria de la Universidad en nuestro distrito data de 2016, año en el que comenzó el dictado de dos Tecnicaturas.

Hoy estamos en condiciones de expresar que la concreción de la sede de la UNNOBA en nuestra ciudad es un proyecto que se gestó en un pasado reciente, que su crecimiento representa un desafío del presente y que su impacto positivo ya puede evidenciarse. Son pruebas de esta última afirmación, por un lado, la actuación de los graduados en el seno de la propia comunidad desempeñándose en los ámbitos laborales para los que se formaron.

Por otra lado, la apertura de convocatorias para la conformación del equipo de profesores locales de la Universidad para las distintas carreras que se dictan trajo consecuencias positivas en dos sentidos: en la respuesta de docentes y profesionales que se presentan a la convocatorias y son seleccionados;  y en la manifestación del deseo, no sólo por parte de los alumnos, sino también de profesores y profesionales, de formar parte de un proyecto educativo y social que nos pertenece a todos como habitantes y ciudadanos del distrito.

También la Universidad, a través de las ofertas de los cursos de extensión ha abierto la posibilidad de educación permanente para los distintos actores sociales.

El movimiento que hoy puede observarse en la sede con el dictado de cuatro carreras, la demanda habitacional que ha generado en la ciudad cabecera del partido por la afluencia de alumnos de otras localidades, el trabajo interinstitucional con laboratorios de instituciones educativas, con fábricas y con el Hospital Municipal, son muestras del impacto más que positivo que la UNNOBA tiene y tendrá en un futuro cercano en el partido de General Villegas.

Ricardo Casi, intendente de Colón

“La presencia de la UNNOBA en nuestras cercanías ha sido y es un bastión de formación y un lugar de inclusión”

Sin dudas, la presencia de la UNNOBA en nuestras cercanías ha sido y es un bastión de formación, un lugar de inclusión y una posibilidad de concretar proyectos para muchos de nuestros chicos.

Nos sentimos parte de la Universidad y de este aniversario. El aprendizaje en movimiento, iniciado en la UNNOBA, continúa su vía de construcción colectiva, ligándose a los procesos de organización y desarrollo del territorio; buscando continuamente todos los caminos posibles para construir una Universidad socialmente comprometida.

Franco Flexas, intendente de General Viamonte

“La UNNOBA ha modificado la estructura social”

La creación de la UNNOBA permitió a muchísimos jóvenes de nuestro distrito, primero la posibilidad de estudiar. Habiéndose recibido, esos profesionales son quienes sostienen el distrito. Tener a la UNNOBA permitió mantenerlos dentro del lugar, dentro de la zona, lo que significa no haber perdido tanta cantidad de gente y, además, profesionalizarla. Ellos han modificado la estructura social y las posibilidades de quedarse en el lugar.

La Universidad ha crecido dentro del conocimiento de la comunidad y, más allá de este reconocimiento, también lo ha hecho en la parte educativa y formativa. No es solamente la posibilidad del estudio, sino la consecuencia de eso:  la creación de trabajo especializado que es necesario en nuestras localidades.

Había oficios que anteriormente se hacían simplemente con el conocimiento de la experiencia. Hoy existe un conocimiento técnico que deviene de profesionales que estudiaron de la Universidad, y esto potencia las profesiones. Las diferentes tecnicaturas universitarias nos permitirán, en un futuro, tener mejores profesionales, y esto impactará directamente en mejor calidad laboral.

Vicente Gatica, intendente de Bragado

“El crecimiento de la UNNOBA también se refleja en el desarrollo y crecimiento de los Estados municipales vecinos”

La Universidad Nacional del Noroeste de la Provincia de Buenos Aires genera, constantemente, para toda nuestra región, una serie de oportunidades, por su alcance y, sobre todo, por el nivel académico en las carreras de grado, tecnicaturas o licenciaturas. En ese sentido, por las características y capacidad de la institución, es que en la actualidad todos los municipios de cercanía a Junín cuentan con muchísimos profesionales egresados de esta Universidad.

Esto hace que la zona haya crecido notablemente, no solo en capacitaciones sino además en producción, en función de todos los rubros que la Universidad ofrece entre sus carreras de estudio. Para nosotros en particular, la UNNOBA es un referente y, durante todos estos años, generamos distintos convenios orientados a la producción y trabajo, con el objetivo final de contar con un significativo número de profesionales que se desempeñan en empresas privadas de nuestra ciudad y en el propio Estado, demostrando la capacidad y la preparación necesaria para llevar adelante cualquier tipo de emprendimiento, ya sea privado o público.

El permanente crecimiento de la Universidad Nacional del Noroeste también se refleja en el desarrollo y crecimiento de los estados municipales vecinos. Además, el firme desarrollo y el enorme abanico de oportunidades de estudio de esta institución educativa hacen que muchos estudiantes egresados de nivel secundario en nuestro distrito, se interesen cada vez más en acceder a la unidad académica, siendo la Universidad Nacional del Noroeste, un claro modelo en cuanto a educación superior en la región.

Javier Martínez, intendente de Pergamino

“Contar con esta casa de estudios en nuestra ciudad es un valor inmenso que nos posiciona a nivel regional y nacional”

Nuestra Universidad cumple 20 años y esta es una gran oportunidad para celebrar. Contar con esta casa de estudios en nuestra ciudad es un valor inmenso que nos posiciona a nivel regional y nacional. Un espacio que permite la inclusión e igualdad de oportunidades pensando en el empleo, la producción y las nuevas tecnologías. Sin dudas, la Universidad es un pilar esencial y fundamental para el desarrollo de nuestra ciudad con un potencial enorme para tener un Pergamino mejor.

Gracias a la Universidad los pergaminenses y vecinos de la zona tienen acceso a debates, conocimiento, investigación y pensamiento crítico logrando una importante transformación social.

La UNNOBA trajo grandes oportunidades a nuestros jóvenes, brindando posibilidades de movilidad social y crecimiento. Trajo ilusión y posibilidades a los adultos con capacitaciones, cursos, espacios de debate y discusión que cada día tienen más aceptación y prestigio. Nuestra Universidad pública hoy tiene grandes desafíos. La innovación, la sociedad del conocimiento, las nuevas tecnologías y carreras acordes a los tiempos que corren. Tenemos en Pergamino nuestro semillero de excelencia, tenemos todo el potencial y los recursos para un crecimiento sostenido en el que la Universidad es un pilar fundamental e imprescindible.

Pablo Petrecca, intendente de Junín

“La UNNOBA le dio a Junín la posibilidad de empezar a transformarse en una verdadera ciudad del conocimiento” 

Estamos a poco tiempo de que Junín llegue a los 200 años de vida y, sin dudas, tenemos una historia riquísima como ciudad. Una ciudad que creció y se desarrolló a base de esfuerzo, de trabajo, de compromiso y de nuevas ideas y desafíos.  Indudablemente, uno de los grandes hitos de esa historia fue la fundación del CURJ y, luego, de la UNNOBA que, de la mano del exintendente Abel Miguel, le dio a Junín la posibilidad de empezar a transformarse en una verdadera ciudad del conocimiento, nucleando a miles de docentes y alumnos de toda la región.

La amplia oferta educativa y la excelencia en la formación académica, sumada a la ubicación estratégica de nuestra ciudad y a sus ventajas comparativas en relación a las grandes urbes, hicieron que cada vez más jóvenes elijan estudiar en la UNNOBA, cuyo prestigio fue creciendo año a año.  A diferencia de lo que ocurría hace dos décadas, hoy cientos de jóvenes de Junín y la región tienen la posibilidad de acceder a estudios universitarios gratuitos y, asimismo, decenas de industrias y organismos gubernamentales y no gubernamentales pueden contar con profesionales formados en nuestra propia ciudad que, de esa manera, se transforma en un lugar de oportunidades para todos, con un mercado inmobiliario más dinámico, más actividad comercial y más movimiento.

En síntesis, contar con una universidad pública, gratuita y de excelencia no sólo nos da prestigio, sino que además nos convierte en un destino deseado para los estudiantes y nos posiciona como una ciudad pujante, de gran potencial y en permanente transformación.

En adelante, y de cara a los 200 años, seguiremos trabajando junto a la UNNOBA en nuevos desafíos, tales como el Plan Estratégico Informático y la Agenda del Desarrollo, con el convencimiento de que la Universidad es fundamental para el crecimiento de la ciudad y la región.

Centro de Actividades Universitarias “Edda Adler” de General Viamonte.

Andrea García, presidenta de la Fundación Encuentro Regional, de Florentino Ameghino

“La UNNOBA: pilar fundamental del desarrollo del noroeste bonaerense”

A la universidad de principios del siglo XX, institución que otorgaba el monopolio del conocimiento a las minorías que detentaban el poder político, económico y cultural de Argentina, las y los jóvenes le cuestionaron su carácter elitista, oligárquico y excluyente, dando lugar a la Reforma de 1918. Posteriormente, el gobierno de Juan Domingo Perón les otorgó a las universidades una nueva relación con el Estado y la sociedad, y una nueva “misión” para la etapa que se abría en el país: el derecho y el acceso a la educación se hizo efectivo con el desarancelamiento de 1949 –a partir del Decreto 29.337/49–, que estableció la gratuidad de la educación universitaria.

En los últimos 20 años se inició el proceso de mayor expansión de nuevas Universidades en cada provincia argentina y en el conurbano bonaerense, creándose entonces la Universidad Nacional Noroeste Buenos Aires (UNNOBA) en Junín y Pergamino.  A partir de una idea, un sueño y una decisión política, desde la Fundación Encuentro Regional de Florentino Ameghino hemos trabajado con la UNNOBA para que las y los jóvenes de nuestro distrito tuvieran acceso a una Universidad cercana. Las Casas de la Fundación albergaron a cientos de estudiantes que la vieron crecer, al tiempo que se encontraban con otros que la eligieron y la eligen por su calidad. El prestigio que la caracteriza hace que en la actualidad 174 jóvenes se encuentren cursando distintas carreras de su oferta educativa, 32 de ellos estudiando en la extensión Ameghino. Además, decenas de graduadas y graduados han podido obtener su título universitario y desarrollarse laboralmente a lo largo de estos años.

Su expansión en clave territorial, política, social y cultural la ubica como uno de los pilares fundamentales del desarrollo local y regional, impactando en términos productivos, tecnológicos y ambientales.

En la actualidad, la UNNOBA está presente en Ameghino con dos carreras de pregrado en forma presencial: la Tecnicatura Universitaria en Desarrollo de Sistemas Informáticos, de perfil tecnológico con gran salida laboral, y la Tecnicatura en Mantenimiento Industrial, iniciada este año por un convenio entre el Ministerio de Educación de la Nación, la Fundación Encuentro Regional y la empresa Class. Esta última carrera se dicta en las instalaciones de una fábrica de alta tecnología de maquinaria agrícola como parte de un proyecto de corte innovador, que permite el diálogo del conocimiento universitario científico, no solo con el sistema empresarial, sino también con los sindicatos y las organizaciones del pueblo. El liderazgo social y el protagonismo asumido por la Universidad pública, en este caso la UNNOBA, para la defensa irrestricta de los derechos humanos, el cuestionamiento al orden y la inequidad de género, y las múltiples y acertadas respuestas ante la cruel desigualdad económica y sanitaria desnudada y provocada por la pandemia, la instalan como una de las nuevas instituciones necesarias para el fortalecimiento de la democracia, la reafirmación de la soberanía nacional y la construcción de una Argentina igualitaria.

La UNNOBA ha logrado posicionarse en nuestra región como una institución donde el compromiso con el entorno local es la base de relaciones políticas, sociales, culturales y económicas. Estas permiten a nuestras comunidades disfrutar de experiencias de intercambio, diálogo y aprendizaje colectivo, donde se entrelazan los intereses de la Universidad, el Estado, las empresas locales y la comunidad.

Héctor María Gutiérrez, exintendente de Pergamino, diputado nacional (mandato cumplido)

“La UNNOBA es la creación más importante del siglo”

La creación de la UNNOBA fue plural y realizada desde un esfuerzo colectivo, en la que actuaron las fuerzas políticas y las fuerzas vivas de la ciudad.  La UNNOBA es la creación más importante del siglo. Los méritos que ha tenido son incalculables. Hoy vemos egresados de la carrera de genética, concursando en el mundo; los chicos de informática a veces no terminan la carrera porque comienzan a trabajar, y hay un gran esfuerzo de la Universidad para que esos chicos terminen sus estudios. Ha provocado una revolución en el mercado laboral y en el marco cultural; la Universidad es la revolución del siglo XXI.

En algunos casos la Universidad está desaprovechada, en términos de lo que significa la transferencia tecnológica, ya que tiene una usina de producción muy importante, y tenemos que estar sobre esa usina involucrando a la Universidad en la sociedad, cuestión que creo no se ha logrado en todo este tiempo. Los pergaminenses estamos orgullosos de la Universidad, pero no nos involucramos en la vida de ella. Estoy hablando de gremios, asociaciones profesionales, asociaciones culturales: no hay un involucramiento de la sociedad civil en la vida de la Universidad y eso me parece que es un desperdicio, ya que podríamos obtener más ventajas en términos de transferencia y trabajo en conjunto, generando una sinergia con la UNNOBA.

No es un reproche que hago a la Universidad, ya que, por ejemplo, desde el punto de vista de la extensión universitaria hay mucho esfuerzo y mucho trabajo. La sociedad de Pergamino tiene algunas fallas estructurales en ese sentido que no advierte la necesidad de participar más activamente. Hay iniciativas, pero son individuales y creo que hace falta un esfuerzo colectivo.

Mario Meoni, exintendente de Junín, exministro de Transporte de la Nación (1956-2021) 

Discurso inauguración Edificio Raúl Alfonsín, 18 de diciembre de 2015

“La UNNOBA tiene buena raíz, buenos cimientos, y es hoy una de las más importantes de la Argentina”

Es un momento importante para esta Universidad y a mí me llena de orgullo ser parte de esta historia, aunque desde afuera, siempre estuvimos acompañando, desde que el ingeniero Luis Lima se hizo cargo de la normalización y comenzó a desarrollar cuál sería el fundamento de la Universidad, basado en la declaración de Educación Superior, de la UNESCO.

Con la incorporación de Guillermo Tamarit y Danya Tavela supimos que la Universidad iba a tener un destino extraordinario, porque tiene buena raíz, buenos cimientos y es hoy una de las más importantes de la Argentina. Esta casa de estudios permite la formación, que los alumnos tengan un lugar para desarrollarse, que los profesores tengan un lugar en dónde enseñar, que los investigadores puedan seguir nutriendo sus trabajos y aportando a la sociedad y también se ha logrado el desarrollo de toda la ciudad de una manera impresionante.

Esto no es casual. La Universidad siempre tuvo en claro que estaba creada para formar profesionales, sino que se creó para estar inmersa, inserta, en una región, en una comunidad, en una ciudad. Este edificio es el último de este tiempo, porque seguramente vendrán tiempos mejores en lo que tiene que ver con la infraestructura, pero lo fundamental es que ya ha dado pruebas claras de que, además de todo lo que ha volcado en infraestructura, ha generado lo que necesitamos en la Argentina: gente formada, ciudadanos preparados para desarrollarse en democracia, para desarrollar un entorno socioeconómico, para tener solidaridad con el resto.

 

Rosa Tulio, diputada nacional (mandato cumplido) 

«Ciencia y educación para el desarrollo social y el crecimiento regional»

Siempre es bienvenida una universidad. Es motivo de progreso, de crecimiento. Es la herramienta por excelencia para que nuestros jóvenes tengan igualdad de oportunidades y un futuro mejor. Ese fue nuestro objetivo, por el que trabajé arduamente desde el Congreso de la Nación junto a muchísimos pergaminenses y vecinos de la región para que ese sueño aspiracional se concretara en 2002. Sin dudas que para Pergamino y la región su creación representó un impacto histórico institucional muy fuerte y positivo, un salto cualitativo que nos insertó de lleno en el primer plano educacional de la Argentina.

Con su implementación y desarrollo hay un antes y un después para la ciudad y su zona de influencia, debido a que permitió materializar en el territorio la soñada movilidad social ascendente que tanto inspiró a generaciones enteras. Hoy la UNNOBA hace honor al lema: «Ciencia y educación para el desarrollo social y el crecimiento regional».

Nuestra Universidad representa una casa de estudios de vanguardia, juventud, modernidad e inclusión. Está en permanente colaboración con las fuerzas vivas, posibilitando un potente impulso al medio productivo y profesional, al desarrollo regional y dando respuestas a los desafíos que la cuarta revolución industrial nos depara en materia de innovación y tecnología en el mundo del trabajo. Estoy convencida que la comunidad UNNOBA estará siempre alerta actualizándose a las necesidades de la norpampa.

 


Diseño: Laura Caturla

 

 

 

 

 

 


¿Y ahora? ¿La viruela del mono?

Por Gricelda Incerti

Cuando aún no hemos dejado atrás la pandemia de COVID-19, otro virus, el de la viruela del mono, aparece en el mundo. La detección en cantidad de pacientes y en poblaciones separadas ha provocado una lógica alerta científica, sanitaria, administrativa y social.

La viruela del mono se descubrió por primera vez en 1958, cuando se produjeron dos brotes de una enfermedad similar a la viruela en colonias de monos mantenidos para la investigación, de ahí el nombre de "viruela del mono". El primer caso humano de viruela del mono se registró en 1970 en la República Democrática del Congo durante un período de esfuerzos intensificados para eliminar la viruela. Desde entonces, se ha notificado viruela del mono en personas de varios otros países de África central y occidental: Camerún, República Centroafricana, Costa de Marfil, Gabón, Liberia, Nigeria, República del Congo, Sierra Leona y República Democrática del Congo, donde se registran la mayoría de las infecciones.

Los casos de viruela del mono en personas que han ocurrido fuera del continente africano hasta ahora estaban relacionados con viajes internacionales o animales importados, incluidos casos en los Estados Unidos, así como en Israel, Singapur y el Reino Unido. Desde inicios de este mes, autoridades de salud de varias naciones —desde Europa hasta Canadá, Estados Unidos y Australia— comenzaron a detectar casos de esta enfermedad, cuyos brotes anteriores habían sido contenidos y en los que, en algunos casos, no se registran contactos estrechos ni viajes a países endémicos.

El agente etiológico  que causa la enfermedad de la viruela del mono es un virus que pertenece al mismo género de la viruela humana, aunque tiene un mapa genómico diferente. “El virus de la viruela del mono pertenece a un género (Orthopoxvirus de la familia Poxviridae) que también incluye a los virus que causan la viruela humana (variola), viruela bovina y un tipo de virus utilizado como vacuna para la viruela humana (vaccinia)", explica la doctora en Química Biológica, Silvina Goenaga, docente de la Maestría en Control y Prevención de las Zoonosis de la UNNOBA.

“Es un virus conformado por una doble cadena de ADN, envuelto de una envoltura glucolipídica. Si bien el virus variólico y el virus símico corresponden al mismo género viral, son entidades diferentes y tiene rangos de hospedadores diferentes, es decir, pueden enfermar distintos animales”, sintetiza Goenaga.

También aclara que el virus símico es una zoonosis, esto significa que es un virus que puede enfermar a animales y también al  ser humano, con cepas bien diferenciadas: “Hay dos cepas genéticamente distintas del virus de la viruela símica: la cepa de la cuenca del Congo (África central) y la cepa de África occidental. Las infecciones humanas con la cepa de África occidental parecen causar una enfermedad menos grave, en comparación con la cepa de la cuenca del Congo”.

Goenaga, docente de la cátedra Ecología y Genética de las Enfermedades Transmisibles por Vectores, explica  por qué en este virus existe la particularidad de transmisión de persona a persona: "El virus de la viruela del mono tradicionalmente se transmite principalmente por contacto directo o indirecto con sangre y fluidos corporales, por lesiones de la piel o las mucosas de animales infectados. Sin embargo, existe la transmisión de persona a persona, la cual puede producirse por contacto estrecho con secreciones infectadas de las vías respiratorias o lesiones cutáneas, fluidos corporales de una persona infectada, o con objetos contaminados recientemente con los fluidos del paciente o materiales de la lesión. La transmisión se produce, principalmente, por gotículas respiratorias”.

Sobre el origen de la enfermedad en humanos, Goenaga, sostiene: “Será el análisis epidemiológico el que podrá determinar el origen de la trasmisión del brote actual del virus. Esto aún está en estudio por parte de las comunidades científicas”. 

¿Una nueva vacunación contra la viruela?

En el pasado, la vacuna antivariólica demostró una eficacia del 85% para prevenir la viruela símica. Sin embargo, la vacuna ya no está accesible al público, ya que se suspendió su producción tras la erradicación mundial de  la enfermedad en el año 1980. Para quienes están vacunados, ¿la vacunación antivariólica previa puede contribuir a que la evolución de la enfermedad sea más leve? ¿Y para los que no están vacunados?

Según apunta Goenaga, la vacuna contra la viruela podría ser el arma de prevención para una enfermedad como la viruela símica: “Se ha demostrado que la vacunación contra la viruela ayuda a prevenir o atenuar la enfermedad por la viruela símica, con una eficacia del 85%. Sin embargo, aquellas personas que no están vacunadas, menores de 40 a 50 años, dependiendo del país, pueden ser más susceptibles a la viruela del mono debido al cese de las campañas de vacunación contra la viruela en todo el mundo tras la erradicación de la enfermedad”.

Esta efectividad se debe a las proteínas que tienen en común que  ambos virus, quienes están muy emparentados. Por eso, la antigua vacuna pueden favorecer a que el sistema inmunitario sea capaz de protegerse.

Sobre esto, no obstante, existen controversias entre las agencias sanitarias de los países más afectados. Mientras para el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (EDDC) “faltan datos de eficacia de esta vacuna contra la viruela del mono en humanos” y ha descartado la vacunación porque considera que el riesgo que tiene este virus es bajo, la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido (UKHSA) recomendó la vacuna para el personal sanitario, a fin de que pueda estar expuesto a pacientes con el virus de la viruela del mono. Además, ha pedido que también se inocule a quienes trabajan en tareas de desinfección y a personal de laboratorio que trabaja con el virus. Por otro lado, propuso realizar lo que se conoce como "vacunación en anillo", una práctica que consiste en que, en caso de contacto estrecho con un paciente positivo que no esté vacunado, debería ofrecerse la posibilidad de vacunarse tan pronto como sea posible.

Por su parte, los expertos de la OMS afirman que el brote actual de viruela del simio debería ser más fácil de contener que el del COVID-19  y que la enfermedad es más fácilmente identificable y controlable.

Documento-OMS-OPS-20deMayo

El 14 de mayo de 1980 la Organización Mundial de la Salud anunció que se había erradicado la viruela. El último caso conocido de viruela se reportó en África en 1977.

Tratamiento y medidas de prevención

Sobre los tratamientos específicos disponibles para la infección, la investigadora sostiene que “al igual que para la mayoría de las enfermedades virales, no hay tratamientos específicos contra la infección por el virus de la viruela símica”, y agrega: “Los síntomas de la viruela del mono se suelen resolver espontáneamente. La atención clínica de la viruela del mono está direccionada a aliviar los síntomas, gestionar las complicaciones y prevenir las secuelas a largo plazo. Es importante cuidar la erupción dejando que se seque, si es posible, o cubriéndola con un apósito húmedo para proteger la zona, si es necesario”. “No es como el virus del sarampión o del COVID, cuya transmisión de persona a persona es muy alta y eso ayuda a que se propague”, enfatiza la investigadora.

El Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos  recomienda, como medidas de prevención para evitar la propagación e infección del virus,  una buena higiene de manos después del contacto con animales o humanos infectados. Por ejemplo, lavarse las manos con agua y jabón o usar un desinfectante para manos a base de alcohol. A su vez, sobre todo para los trabajadores de la salud que atienden a casos sospechosos o confirmados de viruela símica, deben implementar protección para los ojos, mascarilla quirúrgica, bata y guantes desechables”, sostiene.

Cómo la ciencia venció a la viruela

El caso más emblemático del triunfo de la ciencia sobre un agente infeccioso es el de la viruela: la única enfermedad humana que  desapareció gracias a la vacunación.

La viruela, fue una de las enfermedades más temidas del mundo y se calcula que, solo en el siglo XX, provocó 500 millones de muertes. Era una infección altamente contagiosa causada por un virus que se transmitía principalmente por la inhalación de las gotas que exhalaba por la nariz o boca una persona contagiada. Sus síntomas incluían fiebre y fatiga, y después la enfermedad producía una característica erupción en la piel, cuyas manchas se convertían en pústulas que formaban cicatrices y dejaban, a los que lograban sobrevivir, con terribles desfiguraciones. Otros quedaban ciegos debido a las lesiones que la infección dejaba en las córneas. La viruela era mortal en hasta 30% de los casos.

En 1796 el médico inglés Edward Jenner descubrió la vacuna contra la viruela. Así se crea la primera vacuna de la historia.

El último caso reportado de viruela ocurrió en Somalía , en 1977. Pero el camino hacia la erradicación de la viruela había comenzado 200 años antes, con el famoso descubrimiento del científico británico Edward Jenner que condujo al desarrollo de la vacuna contra la viruela, en 1796. Esta, se puede decir, fue la primera vacuna humana. De 1958 a 1977, la Organización Mundial de la Salud llevó a cabo una campaña mundial de vacunación que erradicó la enfermedad en 1979, convirtiéndola en la única enfermedad humana finalizada por una vacuna.

Desde 1921 hasta 1980, la gran mayoría de la población recibió la vacuna de la viruela, que fue obligatoria durante más de 50 años. En Argentina, la vacuna contra la viruela se aplicó hasta 1978. En 1980 la erradicación de la viruela fue un hito en la salud pública mundial.

Al final, todo termina en la vacuna

Respecto del largo recorrido de las inmunizaciones, de la viruela al coronavirus,  la doctora  Goenaga no duda en afirmar que las vacunas continúan siendo la única herramienta segura dentro del mundo de las distintas enfermedades:  “Las inmunizaciones son muy importantes en la población porque previenen enfermedades, discapacidades y defunciones por enfermedades prevenibles por vacunación, tales como el cáncer cervical, la hepatitis B, el sarampión, la poliomielitis o la viruela. El más claro ejemplo de la importancia de la vacunación se puede percibir con el SARS-CoV-2. El desarrollo y administración de las vacunas para COVID-19 permitió prevenir esta enfermedad, o que las personas presenten cuadros más leves.  En este caso, la vacunación es una herramienta fundamental para controlar la pandemia. En el caso de la viruela humana , la vacunación sostenida en el tiempo y a nivel mundial permitió la erradicación de esta enfermedad en toda la población humana”.

Foto de portada:

Escena de la peste de 1720 en La Tourette (Marsella). Óleo sobre tela. Michel Serre. Musée Atger. Montpellier.

Fuentes:

Human Monkeypox: Epidemiologic and Clinical Characteristics, Diagnosis, and Prevention

Casos humanos de viruela de los monos en Kasai Oriental, Zaire (1996-1997)

Resolución de la OMS. Erradicación mundial de la viruela

 


Sharenting, infancias en la nube

 

Por Gricelda Incerti

Recuerdo de nuestro bebé. Ese era el nombre el álbum de fotos donde se pegaban las imágenes impresas de nuestros niños y niñas. Regalo de alguna tía, se compartía en los almuerzos familiares, despertando la risa por lo que se recordaba. También era tradicional disponer una hoja de papel de seda entre las hojas para separar y proteger las fotografías.

En la actualidad la infancia se ha vuelto pública y momentos que antes eran privados y generaban, incluso, algún enojo, por esa foto sin ropa en un río cordobés, ahora se exponen en línea. Esta práctica se denomina sharenting, un anglicismo que proviene de share (compartir) y parenting (paternidad) y consiste en documentar las primeras sonrisas, palabras, pasos, y cada una de las anécdotas de los más pequeños en Facebook, Instagram y otras redes sociales. Y se ha convertido en una práctica tan habitual que el diccionario británico Collins lo incluyó en sus páginas en 2016. Desde entonces, el fenómeno no ha dejado de crecer. Hasta ahora, no ha existido otra generación de niños y niñas con una infancia tan pública. Y es probable que, cuando crezcan, muchos no estén de acuerdo con ello.

María Belén Chilano, abogada y docente de la UNNOBA, explica: Este fenómeno está cada vez más presente en las prácticas de los adultos y tiene como principal característica o consecuencia la creación de una 'huella digital' de los y las menores. Esta huella digital no es otra cosa que el rastro que se deja al navegar e interactuar en el espacio virtual”.

Chilano es integrante del proyecto de investigación "Competencias digitales en la universidad y su impacto en las prácticas académicas y cívicas de estudiantes y profesores" de la UNNOBA. “Son los propios padres quienes construyen la identidad digital  y lo preocupante de esto es que en la mayoría de los casos se hace sin el consentimiento de ellos”, sostiene, y especifica el significado y los riesgos de la huella digital: “Es imborrable, que es para siempre. Además, la realidad también es que nunca se logra erradicar por completo esa información, una vez que la compartimos pueden hacerse capturas de pantalla y reenviarse o volverse a publicar, quedando en manos de cualquier persona”.

El trabajo sobre sharenting se desprende de una  línea de investigación que se enfoca en estudiar las formas de vulneración de la intimidad en el uso de las redes sociales. Un grupo interdisciplinario de investigadores e investigadoras, becarios y becarias de la UNNOBA, y también de universidades nacionales y extranjeras, que han sido invitadas a formar parte del grupo de investigación, desde el año 2018 estudia e investiga la relación que establecen las juventudes con las tecnologías digitales en proyectos financiados por la Secretaría de Investigación de la UNNOBA. Este proyecto está radicado en el Instituto de Política y Gobierno (IPG) de la Universidad y el equipo, dirigido por Raquel Tarullo (CONICET), está conformado por: Belisa Martino, Javier Charne, Yanina Frezzotti (CONICET), Sabrina Pompei, Clara Masciulli, Lucía Papa, Erica Izquierdo, Belén Chilano, Lorena Sarquiz, Celina Craviolatti, Sebastian Cossola , Agnese Sampietro y Mariana García. La investigación sobre sharenting fue presentada en la Jornada de Jóvenes Investigadores del año pasado.

El peligro de eternizar la infancia en las redes

Cuando somos mamás y papás nos invade la sensación de que “eso tan extraordinario no dura mucho”, entonces debemos perpetuarlo para siempre, por lo que comenzamos a fotografiar cada uno de los instantes de los pequeños: el primer llanto, el primer baño, foto con la abuela, con la tía, en la cunita o la primer sonrisa. Años atrás lo hubiéramos llamado el “sharenting analógico”.

Al realizar una búsqueda rápida en Instagram, hay veintiún millones de fotos y videos publicados con la etiqueta #bebé, y otros nueve millones con el hashtag #niño.  Fotografías producidas o casuales que capturan a un bebé, minutos después de haber nacido; también a niños y niñas cumpliendo años, comiendo, cantando o jugando. El acceso extendido de fotos y videos alimenta día a día ese archivo abierto a todos los usuarios de redes sociales. “Este trabajo es una primera aproximación que se está realizando mediante una investigación exploratoria, en la que se analiza la bibliografía existente sobre la temática, y que tiene como fin estudiar este fenómeno y las consecuencias jurídicas que puede ocasionar”, afirma la abogada, graduada de la UNNOBA, y docente del Seminario Medios de Comunicación y Sociedad, que se dicta en la carrera de Abogacía.

Para Chilano, el confinamiento favoreció el aumento de  la utilización de dispositivos digitales, desencadenando en una importante sobreexposición en las pantallas.  “En este contexto, el  trabajo pretende visibilizar los riesgos y concientizar sobre la necesidad de hábitos saludables en el mundo digital, sobre todo cuando involucra a las y los menores de edad. Puntualmente realizamos un análisis de la normativa nacional vigente para conocer si es suficiente la protección de los derechos de los menores implicados en el fenómeno del sharenting”, agrega Chilano.

 

 

La abogada insiste en que una de las consecuencias principales de este fenómeno es la creación de una huella digital y hace referencia al rastro que se deja al navegar en el espacio virtual :"Tengamos en cuenta que en nuestro país no está legislado el Derecho al Olvido, que es el derecho a solicitar suprimir de la red imágenes o datos propios. La realidad también nos dice que nunca se logra erradicar toda esa información”.

Por otro lado, hace hincapié en la postura que puedan tomar esos menores cuando crezcan: “Desde antes del nacimiento ya tenemos imágenes publicadas, y cuando alcancen cierto discernimiento puede estar en desacuerdo con esa huella que dejaron sus padres. El hecho de compartir y publicar la crianza de los chicos, se constituye así en una práctica riesgosa, que potencia la vulnerabilidad de los y las menores en las redes sociales”.

¿Y cuáles son estos riesgos?

De la investigación se desprenden algunas situaciones riesgosas que pueden acontecer y se puntualizan en dicho trabajo:

  • Violación de la privacidad e intimidad de menores.
  • Cesión de datos personales y biométricos.
  • Huella digital imborrable.
  • Ciberbullying o ciberacoso.
  • Reclamos judiciales por conflicto de los progenitores entre sí, en especial cuando se encuentran separados o divorciados, o también del niño o niña en su adultez.
  • Quienes tengan acceso a esas fotos podrán suplantar su identidad, crear perfiles falsos, hacer montajes fotográficos (tipo memes) que puedan ridiculizarlos.
  • En casos más extremos: el grooming (acción deliberada de un adulto, varón o mujer, de acosar sexualmente a una niña, niño o adolescente a través de un medio digital) y la explotación sexual infantil.

“A pesar de todas las medidas que se tomen, hay que asumir que en cuanto se sube la imagen a la red, corre el riesgo de viralizarse”, advierte la abogada y enumera las normativas vigentes que hoy tenemos en nuestro país:

  •  Contamos con la Convención sobre los Derechos del Niño (CDN), que es la norma de mayor jerarquía e importancia. En su art. 16 dispone que: “Ningún niño será objeto de injerencias arbitrarias o ilegales en su vida privada, su familia, su domicilio o su correspondencia ni de ataques ilegales a su honra y a su reputación. El niño tiene derecho a la protección de la ley contra esas injerencias o ataques”. Además, consagra el principio del interés superior del niño como criterio para determinar el contenido de cualquier decisión en la que esté involucrado un menor de edad. Esto quiere decir, que el niño que posee discernimiento debe ser escuchado y su opinión tenida en cuenta, en toda cuestión que lo involucre.
  • En 2005 se promulgó la Ley Nacional N° 26.061 de “Protección Integral de Derechos de niños, niñas y adolescentes", que regula el respeto por la dignidad, reputación y propia imagen de los menores, en su art. 22, y dispone que está prohibido exponer, difundir o divulgar datos, informaciones o imágenes que permitan identificar a los niños/as, cuando se lesionen su dignidad o la reputación o intimidad. Esto determina que cuando esa exposición sea manifiestamente contraria al interés superior del niño/a, no podrán desarrollarse, aún con su consentimiento y el de sus representantes legales. Es decir, si la conducta es manifiestamente perjudicial, ni siquiera su consentimiento, o el de sus progenitores, habilitaría la exposición.
  • En lo que respecta al Código Civil y Comercial de la Nación es importante el art. 53 que dispone la necesidad del consentimiento de la persona para la captación o reproducción de la imagen o la voz, salvo las excepciones que estipula. Allí no encontramos como excepción a requerir consentimiento, el hecho de que los progenitores compartan imágenes o la voz de sus hijos/as en el espacio virtual.
  • Es importante también resaltar que es deber de los padres, y así lo establece el art. 646 del Código Civil y Comercial, oír y tener en cuenta la opinión del hijo/a y también respetar su derecho a participar en su proceso educativo y en lo concerniente a sus derechos personalísimos. En el art. 26 del mismo Código se establece que, a partir de los 13 años, el o la menor puede decidir por sí mismo/a la realización de tratamientos médicos no invasivos, con fundamento en el grado de madurez presumido a esa edad. Pero nada dice en las normas sobre si se le debe reconocer, alcanzada esa edad, la facultad de negarse a que se comparta información personal en redes sociales.

Más allá de todo lo descripto anteriormente, Belén Chilano asegura que “aunque se disponga de una amplia normativa jurídica, se requiere de medidas más específicas que puedan proteger aún más los derechos de los y las menores en el uso de las redes sociales virtuales, siempre a favor del bienestar y el interés superior de ellos". "Además, las eventuales consecuencias y riesgos mencionados, existe el robo de identidad, que todavía no encuentran recepción en las leyes”, añadió.

Por otro lado, de la investigación se desprende la importancia de la alfabetización digital: “Creemos que todo avance legislativo debe ir acompañado de una cuestión muy importante que es la de promover una alfabetización digital para contribuir a desarrollar las competencias necesarias para que usuarios y usuarias de redes puedan detectar los riesgos y tomar medidas para resguardar su seguridad y su privacidad”

Recomendaciones para progenitores

“Este trabajo de ninguna manera intenta atemorizar a los padres en su rol de usuarios de redes sociales. Entendemos que son conductas que en sí mismas son inofensivas, y que se dan en el pleno ejercicio de libertad de expresión de los padres. Pero sí creemos que es necesario tomar más conciencia de los potenciales riesgos que pueden acontecer en las redes sociales virtuales”, aclara Chilano y da pautas de cuidado a tener en cuenta: “Como recomendaciones de un buen uso de estas plataformas, podemos mencionar: no publicar fotos sensibles, aunque nos parezcan inofensivas; configurar la privacidad de cada cuenta y plataforma que se utilice; revisar de vez en cuando la lista de amigos en la red. También hay opciones como no publicar fotos sensibles, cuidar el rostro, e insistimos mucho en promover una educación digital para contribuir a desarrollar competencias, que los usuarios puedan detectar posibles conflictos a tiempo y resguardar la seguridad”.

Los especialistas en seguridad informática afirman que es importante comprobar los ajustes de privacidad y que los padres deben asegurarse qué datos están haciendo públicos sobre sus hijos. "Creo que es fundamental pensar antes de publicar y revisar regularmente las cuentas en las redes sociales para evitar que la información caiga en manos equivocadas", añade la abogada y afirma que “tanto Facebook como Instagram cuentan con opciones para limitar lo que ven tus contactos". Por eso, recomienda  "desactivar las funciones de ubicación y geolocalización a la hora de compartir las imágenes,  y no dar demasiada información sobre la vida privada del pequeño, sobre todo si no se conoce a ciencia cierta quién puede ver o usar esos datos”.

Diseño : Laura Caturla


COVID-19: estudio sobre el impacto en estudiantes

Por Gricelda Incerti

Y de pronto se encontraron de nuevo en sus habitaciones. Recordando momentos de una adolescencia no tan lejana, sentados en la mesa de siempre y sintiendo olores que los llevaban a la infancia. Vieron a sus padres con otra mirada, más cansados y tal vez, un poco tristes. Encontraron abuelos desorientados y palabras nuevas. "Confinamiento", "distanciamiento social", o "aislamiento" se instalaron en sus vidas.

Y los amigos del otro lado de la pantalla del celu, todos con la misma pregunta “¿qué onda, che?”. Empezaba la cuarentena. “¿Cuarentena?", "¿de qué se trata?", "¿adentro de casa?", "¿pandemia?", "¿coronavirus?", "¿y la facu?", "son quince días, tranqui.”

Debido al cierre de las instituciones educativas y la cancelación de eventos, muchos adolescentes y jóvenes admitieron que se perdieron algunos de los momentos de su juventud, como charlar con amigos, la  participación en clase y la socialización propia de su edad. La empatía, el estrés, el autocontrol y la ansiedad fueron  conductas recurrentes que manifiestaron tras el  Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO).

La UNNOBA, desde el Instituto Académico de Desarrollo Humano, de manera conjunta con la Escuela de Arte XUL-Solar realizó una investigación en sobre el impacto generado en la población estudiantil, a partir de la implementación del  ASPO, el cual irrumpió en la vida institucional e individual de cada sujeto.

Las licenciadas en psicología Raquel Castro (docente de la UNNOBA en la carrera de Enfermería) y Claudia Mariel Dell'Oglio (profesora de la Escuela de Arte Xul Solar de Junín), llevaron a cabo un sondeo en alumnos de la UNNOBA y la Escuela de Arte en el año 2020.  Se realizaron 433 encuestas, de todas las zonas de incumbencia de la Universidad y de la Escuela, respondidas en su mayoría por mujeres. Los rangos de edad oscilaron, entre los 17 y 40 años.

“Las instituciones educativas se vieron obligadas pasar a una dinámica virtual, lo cual modificó la escena del aprendizaje y también el modo cotidiano de vivencias en cuanto a los lazos sociales en los estudiantes. Esto despertó el interés en generar conocimiento en relación al impacto producido en las subjetividades de cada estudiante, conociendo el efecto a nivel físico, psíquico y social sobre sus vidas, y también sobre la vida institucional, sostuvieron las psicólogas, a lo que agregaron: “Esta investigación tiene como objetivo construir conocimiento. Desde una situación tan límite como fue la pandemia, quisimos conocer el impacto en los estudiantes, y qué sucedió en ellos al pasar de la presencialidad a la virtualidad”.

 Aspectos psicosociales

De acuerdo a los resultados de la investigación,  los jóvenes en su gran mayoría no sentían estar en alto riesgo de contagio; sólo creyeron que estaban expuestos los trabajadores de la salud , quienes atienden al público, o trabajadores del  transporte, gastronomía, cuidado de niños, personas mayores y sus familiares cercanos. Como significativo aparece que el ASPO provocó dificultades en la situación laboral y económica de los encuestados y/o su familia. “Algunos estudiantes vieron como sus familiares o ellos mismos perdieron sus fuentes de trabajo. Esta situación irrumpió en su vida, generando incertidumbre respecto al futuro inmediato",  afirma la magíster Raquel Castro.

A su vez, resalta que la cuarentena estricta tuvo cuestiones positivas: “Encontraron que tenían más tiempo. Pudieron dedicarse a cosas que les gustaba hacer y compartir más tiempo con su familia. En relación a lo económico, llamó la atención el ahorro de dinero, al no tener que viajar”.

Salud Física y emocional

Con respecto a la salud física, un importante porcentaje de los encuestados señaló que, al margen de mantener una dieta variada, tuvieron un marcado aumentado en el apetito. También sufrieron alteraciones en el sueño. Un 78 por ciento dijo sentirse cansado o con poca energía, y un 72 por ciento mostró trastornos de ansiedad refiriendo haber aumentado su consumo de alcohol, tabaco u otras sustancias.

Un porcentaje significativo presentó dolencias fuera de lo habitual, desde migrañas hasta trastornos digestivos y alergias, y varios debieron recurrir a profesionales de distintas especialidades de la salud.

Otros estudiantes expresaron que, por el estrés y las restricciones que les generó la pandemia, no pudieron concentrarse ni llevar a cabo sus hobbies o actividades placenteras, perdiendo interés en ellas. Un dato significativo es que 72 por ciento tuvo dificultad en concentrarse en actividades que lo requerían. Al ser interrogados si vieron la necesidad de recurrir a un profesional de la salud mental, el 20 por ciento respondió afirmativamente.

Consultados sobre la salud emocional en su gran mayoría indicaron sufrir de estrés, ansiedad, aburrimiento, frustración, angustia, molestia, miedo, apatía y felicidad. “¿Se detiene mi proyecto de vida? ¿Qué va suceder con lo que aspiro? Eran preguntas recurrentes”, sostiene Dell'Oglio y agrega: “Los estudiantes  describen este tiempo como de introspección profunda, reflexión, interioridad, encuentro con uno mismo; de maduración y en algunos casos de relajación. Tiempo para estar en sus casas, reordenar el hogar, leer, mirar series. También aseguran que este 'tiempo' les ha permitido tener una mejor organización en relación a la rutina diaria y a la eficiencia y optimización en el uso del tiempo; aprendieron cosas nuevas y se animaron a nuevos emprendimientos”.

Por lo que la licenciada se pregunta: “¿Necesitábamos una cuarentena para poder hacer lo que nos gustaba? Quiere decir que estamos viviendo bastante complicados; y esto marca el grado de felicidad de las sociedades. Si te dicen teníamos tiempo para hacer lo que nos gustaba, quiere decir que en la vida cotidiana no existe tiempo para nuestros hobbies, para hacer lo que nos gusta”. 

 

Desempeño en los estudios

En su gran mayoría los estudiantes encuestados dijeron poseer recursos y conectividad adecuada,  y  sólo la mitad de ellos cuentan con espacios ideales para el estudio. Otros aseguraron verse afectados en su intimidad . Ante dificultades en la realización de tareas tuvieron contacto con sus compañeros y docentes. Con respecto al manejo del tiempo en las clases no presenciales algunos se ordenaron en una rutina, mientras que otros manifiestan haberse sentido desorganizados.

De las instituciones y las clases presenciales contaron extrañar la rutina horaria, los saludos y abrazos, los encuentros con los compañeros, las actividades grupales, la explicación y acompañamiento de los profesores. “Pensando en que por una cuestión generacional los alumnos están acostumbrados a las nuevas tecnologías, lo primero que aparece es que desean volver a la presencialidad, quieren los abrazos, los saludos en las aulas y en los pasillos; estudiar en grupo, quieren volver al contacto con los profesores”, sostienen las docentes.

Dell'Oglio señala que si bien muchos plantean el modelo híbrido “necesitan el lazo con el otro”. “Hasta antes de la pandemia veníamos cuestionando si la escuela sí o no, si las instituciones educativas estaban actualizadas o no, si los planes teníamos que reverlos. Se cuestionaba mucho todo. Si de algo no podemos dudar es de la necesidad y la importancia del espacio institucional”, afirma. Y asegura contundente que esa transferencia con el otro es necesaria para aprender y tiene que estar: "La ausencia de lo institucional-educativo incidió negativamente en el aprendizaje y en lo social. Imaginen aquellos chicos que ingresaron a la universidad o a nuestra escuela. Ese momento físico es único. Es el lugar que 'me va a pertenecer'".

 Fortalezas y debilidades que encontraron en las instituciones

Sobre a la situación académica durante la pandemia algunos estudiantes  destacaron que se animaron más a participar en las clases virtuales que en las presenciales; otros refieren sentirse más cómodos y libres de elegir estar o no en las clases, y también sobrevaloran el ahorro del tiempo y el dinero. Con respecto a los docentes destacaron la comunicación y el aprendizaje mutuo, la adaptación a los cambios, la buena disposición, disponibilidad y esfuerzo para darle continuidad al ciclo lectivo.

“Los estudiantes marcaron la dificultad que reviste la no presencia en el aula, la falta de contacto con los compañeros para llevar a cabo las actividades grupales. Fueron apreciaciones recurrentes”, subraya Castro.

Y agrega que surgió todo el tiempo el valor que tiene para los estudiantes el acompañamiento de los docentes: “Lo vivieron como algo muy positivo, valorando mucho a nivel institucional cómo rápidamente se pusieron en funcionamiento las plataformas, destacando el acompañamiento de los docentes. A su vez, marcaron en todo momento la necesidad, no solo de la explicación del docente, sino de estar en el aula con ellos”.

“El valor del otro quedó plasmado en esta pandemia, porque no se aprende si no hay otro”, concluye.

Las docentes agregaron que la investigación posibilita diferentes líneas de lectura, entre las cuales destacaron la conversión de la institución educativa de manera virtual: “Se puede leer que los agentes de toda la comunidad educativa (docentes, alumnos y familias) se vieron interpelados en la nueva modalidad de vinculación social, existiendo una demanda por la presencia real del otro. Se revalorizó la transferencia de trabajo en el ámbito de las instituciones educativas".

La investigación se realizó durante el inicio de la pandemia y los resultados surgieron del primer impacto de la cuarentena estricta. Ambas prevén una segunda etapa de investigación: “Nos interesa conocer la voz del docente.  Qué sucedió en este año con los estudiantes, y  evaluar si se mantiene la virtualidad en forma híbrida".


 Diseño: Laura Caturla